La Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) del colegio público Nuestra Señora de la Humildad de Soto de Luiña está molesta con la respuesta de la Consejería de Educación a sus quejas por la reducción de la plantilla el próximo curso. Consideran una "tomadura de pelo" que la administración les quiera "camelar" con la reducción de las itinerancias en el centro, cuando, según sus cálculos, pierden 37,5 horas por los dos docentes que suprimen, a lo que añaden las 25 horas del profesor de apoyo solicitado sin éxito para Infantil.

Educación explicó el viernes a este periódico que el centro tendrá ocho unidades, las mismas que el curso pasado, y solo reconoce el recorte de media plaza de Primaria y otra media de Inglés. Sin embargo, las familias dicen que se trata de una plaza entera de Primara.

Por otro lado, los responsables educativos precisaron que al disponer de menos itinerancias habrá más docentes en condición de ser tutores, algo con lo que no están de acuerdo las familias. "Es una verdad a medias", indican, al tiempo que reclaman al consejero, Genaro Alonso, las nueve unidades educativas que, dicen, corresponden al colegio. "Nuestros niños merecen las mismas oportunidades que cualquier otro de un colegio de cualquier ciudad", zanjan en un comunicado.

Por su parte, el diputado y portavoz de Educación de Foro, Pedro Leal, se reunió ayer con la AMPA para darles su apoyo y explicar que su partido tramitará varias iniciativas parlamentarias relativas al centro para su debate en la Junta General.

Leal califica la decisión de Educación de "incomprensible" y considera que este recorte en Soto de Luiña "refleja la improvisación y errática planificación docente del Principado, máxime teniendo en cuenta que el centro dispondrá del mismo número de alumnos".