Tras Nené Losada y Margarita Salas, otra mujer, Carmen Martínez, "Carminina", ya tiene su espacio en la Casa de las Artes y de las Ciencias de Valdés. La vida y trayectoria de la impulsora del Festival Vaqueiro y de la Vaqueirada de Aristébano se da a conocer a través de sus objetos personales, reconocimientos e imágenes, muchas de ellas en la propia celebración. En la tarde de ayer se abrió al público la muestra, con una serie de actos que saldaron la cuenta pendiente que los concejos de Tineo y Valdés tenían con la figura de Carminina desde su fallecimiento en mayo de 2015.

Santiago Martínez, sobrino de Carminina, se encargó de colocar tres ramos de flores en el lugar en el que reposan los restos de su tía. Una sencilla placa recordará para siempre su condición de "vaqueira universal". El propio Santiago reconocía, ya en la sala donde se muestran los objetos que decidió donar, que el resultado es "muy satisfactorio". "Es una emoción muy fuerte; se cumple justicia, con este homenaje, para una mujer que se dedicó íntegramente y luchó por la cultura asturiana". Considera, además, que la muestra "ayuda a entender la historia de todo un pueblo", y defiende la vigencia de la boda vaqueira, tal y como su tía la concibió y dirigió durante 57 años.

Nadie de los que en vida trató con Carmen Martínez podrán olvidar "su fuerte carácter", pero tampoco "el cariño con el que trataba a quienes la conocían de verdad". Es el caso de las mujeres que trabajaron codo con codo con ella en la delegación valdesana de la Asociación Española Contra el Cáncer. "Era una persona que sabía mandar muy bien, sabía repartir muy bien el trabajo. Era alegre, divertida, igual cantaba que reía. Sabía cómo tratar con todo el mundo", explicó Aurora Pérez, que ahora dirige el colectivo. También manifestaron palabras de homenaje las mujeres de la asociación de amas de casa "Santa María de Covadonga", que presidió durante casi tres décadas.

Su papel como maestra, primero en la escuela unitaria de Busto y después en el instituto Carmen y Severo Ochoa, así como su participación y colaboración con toda clase de asuntos municipales, fue destacada por Jesús Landeira, exalcalde de Valdés y actual presidente del Consejo Rector del Festival Vaqueiro y de la Vaqueirada: "La figura de Carminina trasciende a los límites municipales e incluso de comarca. Una mujer que es medalla del Principado de Asturias, y que se convirtió en una persona fundamental en su época. Fue una mujer moderna del siglo XX", aseveró Landeira.

Tras la ofrenda en el cementerio y el paso por la nueva exposición, el acto de homenaje se trasladó a la plaza Alfonso X El Sabio, donde se desarrollaron danzas y bailes, cantos y monólogos estrechamente ligados a la cultura vaqueira que Carminina luchó por mantener y preservar.

Hoy, en Aristébano, se descubrirá una placa en su honor. Para José Ramón Feito, alcalde de Tineo, el legado de Carmen Martínez se ve en "todos los años que estuvo al pie del cañón, preparando la Vaqueirada". Su homólogo en Valdés, Simón Guardado, destacó "que se cumplen 59 años de algo que ella creó, la Vaqueirada, y se lo merecía".