El último pleno del Ayuntamiento de Boal dio luz verde a los presupuestos municipales para el presente ejercicio 2017. Las cuentas, tanto en el apartado de gastos como en el de ingresos, ascienden a 1.937.400 euros, una cifra similar a la del pasado año, cuando alcanzó los dos millones. Entonces, la construcción de la residencia de mayores elevó varios cientos de miles las cuentas boalesas.

En cuanto a la deuda, la entidad local mantiene dos préstamos que aún debe amortizar: uno a causa del plan de ajuste aplicado en 2012, y que se espera poder devolver al completo en el año 2022, y otro, de 80.000 euros, solicitado para financiar la acometida eléctrica de la residencia de mayores del municipio.

La situación financiera del Consistorio, tal y como se refirió en la sesión plenaria, hace que la capacidad para acometer inversiones en infraestructuras que no estén subvencionadas en su práctica totalidad "esté totalmente limitada". Es por ello que las inversiones reales se quedan en unos 156.000 euros del total del presupuesto, e irán a parar al mantenimiento de los servicios e infraestructuras municipales.

Las mayores partidas se dedican al gasto en personal, que se lleva 842.000 euros, y el gasto en bienes y servicios, partida a la que se destinan 854.000 euros.

Esta propuesta de presupuesto fue aprobada gracias a los seis votos del PSOE, partido que sustenta el gobierno local, y la abstención de los dos ediles del Partido Popular.