Multas de hasta 1.500 euros para quienes se bañen con bandera roja, haciendo caso omiso de las indicaciones de los socorristas, y penas similares para quienes los agredan física o verbalmente. Son las sanciones más graves que se recogen en la nueva ordenanza sobre el uso y disfrute de las playas que acaba de hacer pública el Ayuntamiento de Navia. El texto recoge, además, una serie de limitaciones para compatibilizar "el derecho a disfrutar" de los arenales con la obligación municipal de "velar por su uso racional". Todo ello en medio de un verano trágico en cuanto al número de fallecidos por ahogamiento, y en el que los efectivos de salvamento reclaman que se atienda a sus indicaciones en todo momento.
El Pleno del Ayuntamiento dio el visto bueno a la ordenanza, que ahora se encuentra en periodo de exposición pública. Hasta la fecha no existía normativa local sobre estos espacios. Según asegura el equipo de gobierno socialista, en los trámites para lograr el distintivo de bandera azul para Frexulfe, la Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (ADEAC) instó a elaborar una serie de normas para regular el uso y disfrute de los arenales del concejo.
La ordenanza establece dos tipos de sanciones para quienes infrinjan las reglas. Las graves se penarán con multas desde 151 a 500 euros. En estos supuestos se incluyen, por ejemplo, verter materiales que puedan resultar contaminantes o peligrosos, realizar barbacoas en lugares y horarios no permitidos, la tenencia de animales en las playas, bañarse en zonas costeras prohibidas, la venta ambulante de cualquier producto sin licencia para ello, o no acatar las instrucciones del personal de salvamento cuando se requiera.
Pero las sanciones más graves, castigadas con multas de entre 501 y 1.500 euros, se reservan para tres casos específicos: bañarse con bandera roja haciendo caso omiso de los miembros del equipo de salvamento; la "falta verbal o física" hacia este personal; y saltarse un balizamiento de seguridad o zona restringida.
El regidor naviego, Ignacio García Palacios, explica que se trata de una ordenanza similar a la que mantienen otros concejos costeros. Pone énfasis en la necesidad de respetar las indicaciones de los socorristas. "Antes de comenzar la campaña, siempre les comento que, en caso de desobediencia a sus indicaciones, no se debe discutir, sino dar aviso a las fuerzas de seguridad. No puede permitirse bajo ningún concepto que un servicio de vigilancia, que vela por la integridad física de los bañistas, sea respondido sin respeto por algunos de ellos", añade el primer edil naviego.
El grupo municipal de Izquierda Unida votó en contra de la ordenanza. "Creemos que la norma es muy restrictiva, llegando en algunos casos a exceder las competencias municipales", dicen.
