La imposición en Navia de duras sanciones económicas, de hasta 1.500 euros, para aquellos que desobedezcan las señales de advertencia en las playas ha tenido buena acogida entre los usuarios de los arenales del concejo. Los bañistas consultados por LA NUEVA ESPAÑA reconocen el papel de los efectivos de salvamento y la importancia de atender a sus advertencias e indicaciones. "Son los que conocen de verdad la playa, y los que velan por nuestra seguridad", apuntan los usuarios. Los socorristas, por su parte, ven con buenos ojos que se refuerce su posición ante las conductas imprudentes.
Frexulfe es, sin duda, la playa naviega que más riesgos entraña para el baño. El oleaje, las corrientes y los continuos cambios en su morfología la hacen peligrosa, y por eso es común ver ondear la bandera amarilla o la roja. "La prohibición del baño la suelen respetar siempre los visitantes, la gente que viene de otros lugares. Los de aquí, que creen que conocen, en ocasiones arriesgan más al meterse", dice un efectivo de salvamento que realiza el servicio en este arenal, del que es buen conocedor.
Añade que, en caso de izar la bandera roja, esta afecta "a todas las personas, independientemente de sus capacidades o conocimientos", y que siempre que se coloca esta enseña es porque existe algún tipo de riesgo. Sobre el hecho de imponer multas económicas, una medida que ve con buenos ojos, opina este socorrista que "cuando se sancione a una o dos personas, el resto de la gente sabrá a lo que atenerse" cuando no se cumplan las indicaciones del salvamento.
Y es que en Frexulfe ya se han producido este verano, al menos, un par de incidentes, que, afortunadamente, se han saldado sin daños personales. Ambos cuando ya se había cerrado el servicio de salvamento, en un día de bandera roja. "Se metieron en el agua, tuvieron problemas con la corriente y fueron los surfistas los que evitaron una desgracia", describe.
"Yo estoy totalmente de acuerdo con que se pongan multas a quienes no sigan las instrucciones de los socorristas. Se trata de playas peligrosas, que ellos conocen muy bien", asegura Elena Fernández, usuaria de este arenal naviego desde la niñez, puesto que es vecina del mismo pueblo de Frexulfe. "A veces se ven escenas de imprudencia. Cuando dejan solamente mojar los pies, la gente se mete, o acercan a los hijos hasta la orilla cuando está la bandera roja. Se deben tomar medidas", asegura esta usuaria.
Otro bañista, que prefiere no dar su nombre, asegura que "en ocasiones se ve cómo la gente se enfrenta a los propios socorristas", algo que considera "irrespetuoso y temerario". "Si está la bandera roja y te tiras al agua estás poniendo en riesgo tu vida, pero también la de aquellos que velan por tu seguridad", argumenta. "Me parece hasta poca cantidad, deberían ser más duros", dice su compañera.
La normativa sobre el uso y disfrute de las playas que espera aprobar de forma definitiva el Ayuntamiento de Navia, y que podría entrar en vigor a finales de este verano, contempla varios niveles de sanciones para diferentes tipos de infracciones.
Están, por un lado, las multas de 151 a 500 euros, por faltas graves como verter materiales que puedan resultar contaminantes o peligrosos, realizar barbacoas en lugares y horarios no permitidos o no acatar las instrucciones del personal de salvamento cuando se requiera.
Las tipificadas como infracciones muy graves se castigarán con hasta 1.500 euros. En este apartado entran los supuestos en los que el bañista se introduzca en el mar con bandera roja y haciendo caso omiso de los miembros del equipo de salvamento, la "falta verbal o física" hacia este personal y también el hecho de saltarse un balizamiento de seguridad o zona restringida, cuando ha sido colocado por la autoridad competente.
