El cross solidario "Villa de Figueras" lanza cada año un mensaje de esperanza. A la prueba que organiza la Asociación Figueras Solidaria no falta la modelo Sandra Ibarra, que superó un cáncer y creó la fundación que lleva su nombre para ayudar. Ibarra destacó la solidaridad de Asturias y se mostró emocionada porque cada año se encuentra "con más supervivientes como yo".

Muchos corredores que colaboran con la causa se acercaron hacer la foto con la modelo y solidarizarse con la causa. Es una forma de constatar que en Figueras se lucha contra el cáncer. Fue el caso de Álex Banna y José Manuel García, yerno y suegro. El primero vio morir a su padre de cáncer de pulmón y ahora ve luchar a su madre contra el de mama. "Hay que ser fuerte", dijo. Y en el encuentro no faltó un recuerdo para el Alcalde de Castropol, José Ángel Pérez, quien lucha contra la enfermedad.

La carrera recauda fondos para comprar un histeroscopio con destino al hospital de Jarrio. En la carrera adulta (hubo pruebas infantiles y paseo popular) participaron 478. Ganó David Fernández Ginzo. A expensas de un recuento oficial, ayer las donaciones sumaban 10.000 euros. Este año se homenajeó a tres personas: Francisco Ramón Fernández, Luis Fernández y Marta Rodríguez. Los tres eran asiduos a esta prueba y los tres fallecidos en los últimos dos años. El primero, por una encefalitis y los segundos, por cáncer.

"Estoy sin palabras", dijo una emocionada Covi González, esposa de Luis Fernández. Ayer, vio como su sobrino cruzó la meta y alzó las manos al cielo para dedicar la carrera a su tío. Hace tiempo que en Figueras se viven este tipo de escenas. El cross reúne a personas concienciadas contra el cáncer o que han tenido muy cerca la enfermedad. El fin siempre es tener esperanza, dicen.

Para Nieves Rico, esposa del fallecido Francisco Ramón Fernández, "no hay mejor homenaje que éste". Su marido era una persona muy entregada a la causa y al cross "Villa de Figueras".

Desde la primera edición colaboró con el impulsor, Fernando Quintana, "y nunca faltó a la cita". Luis Ángel Benítez también se acordó ayer de los esfuerzos de su mujer, Marta Rodríguez, que murió con 39 años. Pese a las dolorosas historias, la batalla sigue. Y para no parar.