"La coral está bien, lo único que echamos en falta son más voces porque cuantos más seamos, mejor suena", señala Benigno Vidal, presidente de la Coral Polifónica de Tapia. La formación cumple este año sus tres décadas de andadura, con un problema compartido por otras formaciones corales de Asturias: la falta de renovación en sus filas. Sin embargo, añade Vidal, la calidad del grupo es buena: "Podemos actuar con dignidad en cualquier sitio; creo que la coral deja el listón alto allí donde actúa, y tiene prestigio".
Esta agrupación coral nació en 1987, gracias al impulso del párroco boalés Cándido Barcia Rubio, popularmente conocido en Tapia como don Cándido y fallecido el pasado mes de abril. Su primer director fue el ribadense Antonio López, quien asumió la tarea de dar forma a un grupo heterogéneo formado por cuarenta personas, el doble del actual, que no alcanza la veintena de voces.
En estos años, la Polifónica tapiega ha estado dirigida por cuatro personas. Al citado Antonio López le siguieron Javier Fernández, Ángel Fernández Pola y la directora actual, Ana María González, que lleva doce años al frente de este colectivo. "Son un buen grupo, no me puedo quejar. El nivel es bueno, pero haría falta más gente, lo ideal son entre 20 y 25 personas", señala la directora, que también dirige los ensayos del coro de la Asociación de Vecinos de Ortiguera (Coaña).
El grupo está integrado por personas diversas, entre los 28 años de la benjamina y los 89 del decano. Solo cuatro de ellos se mantienen desde los inicios, caso del presidente de la formación, docente ya retirado. También Amalia López es de las veteranas. Explica que ya empezó a cantar en el colegio y que su primera incursión en un coro fue en Vegadeo y poco después entró a formar parte del de Tapia.
"No soy de las que canto en casa", reconoce, al tiempo que explica que no hacen falta grandes conocimientos musicales para entrar en un coro. Su compañero Vidal apoya esta tesis: "Nosotros invitamos a todo el mundo. No es necesario saber música, lo único que hace falta es tener oído; después, si la voz te acompaña y tienes un timbre agradable, mejor".
En este sentido, Vidal insiste en que la Coral tiene "las puertas abiertas de par en par" y anima a los tapiegos a sumarse a esta aventura. Con respecto a por qué los jóvenes no participan en las formaciones corales, considera que "quizás se promociona más la música pop y la tradicional".
Este coro mixto cuenta con un repertorio muy variado, integrado por unas 150 piezas, que sincluyen música sacra, clásica y piezas del repertorio tradicional.
Cada año la Coral Polifónica de Tapia ofrece unas siete actuaciones, tres de ellas en Tapia, repartidas entre los meses de julio, agosto y diciembre. Tampoco falla en la misa del Carmen; "nos gusta cantar ese día, es un orgullo", manifiesta Vidal.
El pasado sábado organizaron en Tapia el XI Festival de habaneras en la iglesia y actuaron junto a las formaciones gallegas "San Martín" de Meirás y Coral Polifónica Eumesa, de Pontedeume. Su siguiente actuación será en el Círculo de las artes de Lugo, junto al Orfeón Lucense y, bromea Vidal, lo haremos "sin complejos", acostumbrados a codearse con formaciones de prestigio.
