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Avelino Rico, emocionado con el homenaje de su pueblo

"Es un honor muy grande, me sorprendió", asegura el excampeón del mundo de billar

Salvador Díez, en una jugada de la semifinal disputada ayer. D. ÁLVAREZ

El billar y Avelino Rico han sido los protagonistas de esta semana en Pola de Allande. La asociación de mayores "Fonfaraón" organizó un torneo de billar a tres bandas en homenaje al que fuera en 1986 campeón del mundo de esta especialidad: su vecino Avelino Rico. El torneo contó con la participación de ocho destacados jugadores llegados de Asturias, Madrid, País Vasco, y Castilla y León, que quisieron formar parte del reconocimiento que el pueblo de Pola de Allande le brindó a Avelino Rico.

Emocionado por el evento que se había organizado en su honor, Rico agradeció el esfuerzo tanto a la organización como a los jugadores desplazados al concejo del Suroccidente para disputar el torneo. "Es un honor muy grande que me hayan hecho este homenaje, es muy emocionante y me sorprendió", aseguró.

A pesar de haber nacido en Bustantigo, su familia emigró a Madrid cuando apenas tenía cuatro años, donde sigue viviendo, a excepción de unos tres años, en plena posguerra, que regresaron a Bustantigo. Su afición por el billar nació cuando tenía 15 años, gracias a su hermano. Una edad que asegura que es tardía en el mundo del billar, pero que no le impidió llegar a lo más alto. Ganó varios campeonatos y el mundial en las Vegas de 1986, "donde me enfrente en semifinal y final a dos figuras mundiales del billar y considerados los mejores jugadores: Raymond Ceulemans y Torbjörn Blomdahl", subraya Rico, quien recuerda que siempre fue jugador amateur y vivió de su trabajo como delineante.

Los jugadores que asistieron al torneo conocen y admiran a Avelino Rico como jugador, pero, sobre todo, como persona. "Es una figura del billar; en cuanto me dijeron en la Federación asturiana lo que se estaba preparando quise venir, nunca olvidaré que cuando empezamos en Valladolid con el club, en 1997 él, campeón del mundo, vino a jugar y a ayudarnos", apunta Salvador Díez.

José Luis Insa, jugador asturiano, reconoce que "Avelino Rico se lo merece, no solo fue un buen jugador, es un ejemplo de persona que siempre ha ayudado a todo el mundo".

Ambos coinciden en que, si el año que viene el torneo continúa, no le faltarán jugadores que quieran disputarlo. Y esa es la idea de la asociación organizadora: su presidente, Manuel Ramos, quiere convertir la cita en una competición federada y darle continuidad anual. "Se creó mucha expectación, el estrado se llenó para verlo los dos días", aseguró.

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