La romería tradicional de La Regalina, que Cadavedo celebra en la jornada de mañana, promete dar la campanada. Este año, además de los actos habituales, se entablará un diálogo entre Cadavedo y Cudillero, entre faliecha y pixueto, entre José Manuel Fernández y Cesáreo Marqués. Por primera vez se unirán dos formas de hablar tan diferentes como vecinas, y que se utilizan anualmente para relatar la actualidad con un toque de ironía: el pregón de La Regalina, en Valdés, y l'Amuravela, en el concejo pixueto.

Esta iniciativa surge después de que, tras décadas portando una tradición histórica, Fernández y Marqués se conociesen al fin, y coincidiesen en hacer algo especial para esta celebración valdesana. "Hacemos los dos lo mismo, somos vecinos, con distintas formas de hablar y tan cercanas, y queríamos realizar un acto en el que se vean estas dos tradiciones", explica Fernández, quien asegura que "el pregón de La Regalina se mantendrá como siempre". Al final del mismo se entablará un diálogo entre ambos, "bien estructurado y que va a prestar mucho; es algo que nunca se hizo y que va a gustar a quienes tengan afición a estos actos", añade el pregonero de Cadavedo.

En su discurso, aventura, se hablará de corrupción, política nacional e internacional, deporte, crónica del corazón y, también, de los recientes atentados en Barcelona. Como no puede ser de otra forma, se referirá, además, a asuntos regionales y locales.

Las fiestas de La Regalina de Cadavedo llegan este año con una renovada directiva, con jóvenes que han tomado la iniciativa. Además, se han llevado las orquestas a la zona de la iglesia. Los actos comienzan hoy con pasacalles, juegos infantiles y la primera de las verbenas. El domingo, a las once, dará inicio el desfile de los grupos hasta el campo de La Garita. A las doce y cuarto serán el pregón, la danza prima, la procesión y el corri-corri, seguidos de misa y romería.