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La Rectoral de Taramundi estará cerrada cuatro meses por obras

El Principado sustituirá la cubierta y mejorará la accesibilidad mediante una inversión que asciende a 196.000 euros

Vecinos en la terraza de La Rectoral de Taramundi. T. C.

El hotel rural La Rectoral de Taramundi permanecerá cuatro meses cerrado por reformas. Desde noviembre hasta febrero del próximo año, este edificio de titularidad municipal será objeto de una importante reforma, la de más calado desde que abriese sus puertas en 1986. El Principado inició ayer el proceso para licitar una actuación que parte con una inversión prevista de 196.000 euros, y que mejorará ostensiblemente las condiciones de este inmueble, símbolo del turismo rural en la región.

Las obras consistirán en la renovación completa de la techumbre del edificio principal, la antigua casa del cura. Además, se mejorará el interior, dejando más espacio y luminosidad en estancias como el comedor, y también se renovará por completo buena parte de la carpintería. "Es el caso de los balcones de madera, que están bastante afectados por el paso del tiempo", refiere el regidor de Taramundi, César Villabrille.

Asimismo, se reformará una habitación para dotarla de un baño adaptado a personas con movilidad reducida. "Es una prueba, para ver cómo funciona, y luego se aplicará a otras habitaciones en futuras reformas", explica Villabrille, que también apunta que se instalarán nuevas rampas para facilitar el acceso a los diferentes espacios.

La Consejería de Empleo, Industria y Turismo es la que se hace cargo de la inversión, siendo el plazo de ejecución de las obras de cuatro meses. "Lo hemos calculado así para que afecte lo menos posible, en temporada baja. Deberá abrir sus puertas de nuevo para el mes de marzo", explica el Alcalde.

César Villabrille se muestra satisfecho con la concreción de esta inversión, que el Ayuntamiento esperaba desde hace meses. "Para nosotros es muy buena noticia. Y esperamos que no sea la única ayuda para el hotel, y que en los próximos años se siga apoyando para que no se deteriore y siga siendo competitivo en el turismo rural", asegura.

La Rectoral abrió por primera vez sus puertas en 1986. Actualmente es propiedad del Ayuntamiento y está gestionada por Jesús Mier.

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