Los vecinos de Piñera y San Juan están sorprendidos por el color del agua que sale del grifo. El Ayuntamiento de Cudillero y la empresa concesionaria del servicio, Asturagua, no advirtieron de la falta de salubridad de este recurso básico, "pero a la vista está que esto (por el agua que aparece en las fotos de la derecha) es como barro. No podemos ni ducharnos", confiesa un vecino.
Las deficiencias en el servicio empezaron a notarse a principios de semana. Todas las casas de las dos localidades tenían el mismo problema, también los restaurantes y las zonas de hospedaje. Precisamente algunos empresarios del sector turístico mostraron su pesar por lo ocurrido. "Queremos ser un municipio turístico, pero aquel que nos visita no puede ni ducharse por las mañanas; esto no es de recibo", recalcó ayer un hostelero. A ello se suma la necesidad de cocinar con agua embotellada, con el correspondiente gasto. "Pagamos el recibo como todos, pero no nos ofrecen el servicio contratado", clama el mismo empresario.
En la tarde de ayer, el agua del grifo no era tan turbia, pero los vecinos de estos enclaves advierten de que es importante controlar lo antes posible estas situaciones y también informar de ellas a los vecinos. Al parecer, la empresa justifica este color del agua en las talas de árboles que se están realizando cerca del acuífero. El agua tenía ayer un color más claro, pero el lunes "parecía chocolate", aseguran los afectados.
El Ayuntamiento de Cudillero comunicó a los vecinos que la competencia era de la empresa concesionaria del servicio de suministro de agua. Este hecho no es aislado en el concejo de Cudillero. Los vecinos de Soto de Luiña también lamentan la falta de calidad y salubridad del agua que sale del gripo. En el colegio ubicado aquí siempre consumen agua embotellada.
