Los alumnos de Cangas saben bien dónde está la reserva natural integral de Muniellos, un emblema para el Suroccidente, sobre todo para los municipios de Cangas del Narcea e Ibias, entre los que se reparte su territorio. Por eso se dieron cuenta enseguida del error del libro de Biología y Geología que utilizan en el Bachillerato de Ciencias del instituto de Cangas del Narcea, que sitúa Muniellos en Galicia.
El error se recoge en la página 196 del libro de la editorial Santillana, en el epígrafe en el que se habla del bosque atlántico en España. Lo ilustra con una imagen de Muniellos en otoño y es en el pie de foto en el que la reserva natural integral se ubica en la comunidad autónoma vecina.
El fallo no ha gustado ni un pelo a los alumnos. Es el principal atractivo turístico para la zona y consigue romper la estacionalidad del sector gracias al encanto que tiene el bosque durante el otoño con la explosión de colores con los que se visten las copas de los árboles y los suelos. Esto hace que los vecinos presuman orgullosos de que el que se considera uno de los bosques atlánticos mejor conservados de Europa esté en su municipio.
Precisamente en uno de los grupos del bachillerato de Ciencias del Instituto de Cangas del Narcea, en 1º B, se encuentra el hijo del guarda forestal de Muniellos, familia que reside en la casa del guarda dentro de la reserva. Él fue uno de los primeros en darse cuenta que su bosque ilustraba el libro, pero que sin embargo no se nombraba ni a Cangas del Narcea ni a Ibias y ni siquiera a Asturias, sino a Galicia. Antonio Ramos Montoya dio con la foto un día ojeando el manual y comentó el fallo con sus compañeros, aunque el revuelo se generó hace unos días cuando en clase abordaron el tema en el que estaba recogido.
"Un día abrí el libro por la página 196 y reconocí la foto nada más verla, es un paisaje inconfundible sobre todo para los que vivimos allí, pero me chocó mucho ver que lo situaban en Galicia", explica el alumno. Al llegar en clase a la página en cuestión, hace tan solo unos días, puesto que ayer mismo se examinaban del tema en el que aparece el error, todos los alumnos se dieron cuenta rápidamente del fallo. "No nos sorprendimos porque ya encontramos más errores en los tres temas que hemos dado, pero cuando es sobre algo que conoces bien causa más impacto", explica.
Este estudiante no comprende qué pudo propiciar el error, ya que recuerda que "toda la reserva está en Asturias, lo que no da lugar a la confusión; es un fallo grande". Y añade que siendo los cangueses y los asturianos "muy orgullosos de lo nuestro, esto nos duele". Su compañera Carmen Menéndez asegura que sintió que se habían olvidado de que existe Asturias. Señala que muchas veces, cuando en los medios de comunicación o en los libros de texto se refieren al norte se suele mencionar a Galicia o Cantabria como ejemplos, mientras que "Asturias aparece muy poco". Para ella, el error del libro "es un poco triste porque para un ejemplo que ponen de nuestra tierra lo sitúan mal".
Otra de las cosas que chirrían a los alumnos es que en otro apartado referido a la fauna se hable del urogallo pirenaico y no se mencione al cantábrico.
Para los profesores, estas equivocaciones les sirven para mostrar al alumnado la necesidad de comprobar la información que reciben, ya que puede contener errores. Javier González, responsable del departamento de Biología y Geología, insiste a sus alumnos en que cualquiera puede cometer un error, desde un profesor, un manual de estudio o la prensa, por lo que les anima a habituarse a contrastar la información que reciben y a no darla por válida de forma inmediata.
