Una excavadora trabajaba ayer en las obras de recuperación de la Poza de Navia. Es el primer movimiento registrado en varias semanas, en las que se decidió realizar un paréntesis en los trabajos debido a diversos factores, como los temporales marítimos y las lluvias torrenciales. Los trabajos continuarán ahora hasta su finalización, aunque han tenido "complicaciones" administrativas, según informa el equipo de gobierno naviego.

La pasada semana, Izquierda Unida denunció la paralización de las obras y la falta de información ofrecida a la población local por parte de la Demarcación de Costas, que financia esta operación, que ejecuta la empresa pública Tragsa.

Ayer, una vez reiniciados los trabajos, el regidor naviego, Ignacio García Palacios, agradeció el interés de la coalición en la obra y explicó las causas de este frenazo: "Fue un cúmulo de factores, de cuestiones obvias. Por un lado, los temporales marítimos, por otro, las lluvias torrenciales, además de la reducción de las horas de luz en pleno invierno, y también la celebración de las Navidades", apuntó el alcalde naviego.

A todo ello se suma un contratiempo administrativo. Para completar la obra, es necesario realizar un pilotaje en la cimentación para la pasarela, un aspecto que ha sufrido un retraso en su licitación. "Se calcula que esta cuestión se resolverá rápido", aseguró García Palacios, quien confía en la buena marcha de la actuación. "La obra no está parada, y está dentro del plazo marcado. Hemos estado encargados de hacer las gestiones y todos los trámites; estamos en nuestro papel de trabajar seriamente", remarcó.

Las explicaciones de las administraciones no han aplacado las críticas sobre la actuación por parte de la plataforma ciudadana "Salvemos la Poza". "Ya han consumido tres de los cuatro meses de plazo y la obra no parece que avance. Mucho nos tememos que se producirán importantes retrasos en un proyecto que nunca nos gustó y al que formulamos alegaciones, a las que nunca respondieron", manifestó.