Los pescadores de Puerto de Vega dicen mantener "una preocupación máxima" por el estado que presenta el espigón que protege el puerto por el oeste. La estructura resultó dañada por los temporales de la pasada semana, y, una vez evaluados los daños, los marineros los consideran "muy graves". Temen que, ante la previsión de nuevas marejadas, la situación vaya a peor, y reclaman una actuación para frenar su deterioro. "Va a terminar cayendo, y eso sería la ruina para todos", advierten los profesionales.

La calma en el mar ha permitido acercarse a la estructura y revisarla a fondo, en busca de las cicatrices que el paso del temporal dejó en el muro. Los golpes que la mar propinó al dique provocaron la caída de más de veinte metros de bloque de la parte superior y de otros cincuenta metros de barandilla. "Eso es lo de menos, porque eso se repone y ya está", incide Ramón Istillarty, pescador y representante de la cofradía "Nuestra Señora de la Atalaya" de Puerto de Vega.

Los daños más graves son aquellos que no se ven a simple vista, los que sólo un ojo experto puede detectar: "Hay grietas desde arriba hasta abajo. El espigón está completamente rajado", describe Istillarty, que sostiene que la punta del dique "está cayéndose" hacia el canal de entrada y salida de este puerto naviego.

"La cabeza del dique está cediendo cada vez más, y no hay nada que lo frene. Vemos cómo avanza, y tarde o temprano va a caer", declara el pescador, que se pregunta por las posibles responsabilidades si sucede lo peor. "Si cae todo abajo, y nos cierra el puerto, ¿a quién pedimos explicaciones?", se pregunta.

La cofradía, asevera Istillarty, lleva años advirtiendo del deterioro del espigón, y aunque se actuó en él hace dos años, los problemas no han remitido. Se invirtieron 730.399,67 euros en 2015, pero la actuación no ha dejado satisfechos a los pescadores, que, a la vista de los nuevos daños, reclaman una nueva inversión en el dique. Se trata de un espigón que consideran "muy importante" para su actividad: "Nos protege cuando los barcos están en el puerto. Es vital", afirma Istillarty.

En cuanto al resto del balance de daños que dejó en Puerto de Vega la fuerza del mar, los pescadores apuntan a que varios bloques de los dos diques del puerto han podido moverse, quizás hacia el canal de navegación, "aunque eso aún no lo hemos comprobado", matizan.

La situación del dique del oeste viene a dar la razón a la cofradía en su petición al Principado para que construya un nuevo espigón en la zona este del puerto. "Con cada marejada, el canal de navegación se hace más estrecho. La cosa va a peor, y una buena solución sería el nuevo dique en el este, que nos protegería en la entrada y salida de los barcos. Ahora, con un poco de mar es peligrosa, y nos estamos jugando la vida prácticamente a diario", relata Istillarty.

La consejería de Infraestructuras, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente prometió el pasado año realizar un estudio y un proyecto para mejorar el acceso de la flota a este puerto del concejo naviego.