La cocinera de la residencia de mayores de San Antolín de Ibias negó ayer que el pasado lunes el equipo de cocina se viera obligado a pedir por las casas del pueblo un pasapurés para hacer la comida a la veintena de usuarios del centro. Así lo denunciaron en este periódico los afectados por el apagón que tuvo 30 horas sin luz al centro debido al temporal de nieve de días atrás. "Queremos aclarar que en ningún momento fue necesario salir a buscar esta material", señaló la cocinera. Los denunciantes también se quejaron de la falta de interés del Ayuntamiento, que no suministró un generador.

A este respecto, el gobierno aclaró que esta petición sí fue cursada al Principado, pero el suministro eléctrico se restableció antes de que llegaran los aparatos.