Las garantías de calidad e idoneidad del proyecto de consolidación del castro grandalés del Chao Samartín quedan ratificadas al haber sido seleccionada esta actuación para recibir financiación dentro del "1,5 por ciento cultural" del Gobierno de la nación. Así lo manifestó ayer en el pleno de la Junta General del Principado el consejero de Educación y Cultura, Genaro Alonso, que defendió que el plan cumple todas las normas vigentes en materia de conservación y que se usan "materiales adecuados", con la única excepción de un muro de hormigón "en una zona en la que el desnivel es tan pronunciado que no hay otra solución técnica". Y, garantizó el consejero, no habrá centro de recepción de visitantes.
"Las exigencias técnicas y administrativas de estas subvenciones estatales garantizan la idoneidad y solvencia técnica del proyecto del castro del Chao Samartín", aseveró el Consejero.
Genaro Alonso intervino en respuesta a las preguntas planteadas por la diputada regional de Izquierda Unida Concha Masa, que se mostró muy crítica con las obras de consolidación proyectadas: "según reconocidos expertos en la materia, el proyecto contiene gravísimas irregularidades que pueden afectar a depósitos que no han sido investigados. Además, carece de los informes preceptivos emitidos por personal cualificado en conservación y restauración de bienes culturales", advirtió Masa, que también alertó de la posibilidad de que este plan pueda causar "daños irreversibles", sobre todo por el uso de hormigón armado y resinas. "Tiene el deber de informarse a fondo, de pedir estudios profesionales, para tomar todas las medidas de precaución", añadió.
En primer término, el Consejero mostró su satisfacción porque la gestión del yacimiento grandalés haya vivido "sustanciales avances, desde la situación de enfrentamiento anterior" entre administraciones a la etapa actual de colaboración. Afirmó también que se cumplen todas las normativas internacionales con el proyecto: "se plantea la reversibilidad de todas las actuaciones, la señalización de los recrecidos o la diferencia clara en los materiales en las partes reconstruidas", apuntó. Eso sí, Genaro Alonso reconoció el uso de hormigón, "en un único muro en la plaza del yacimiento, en una zona en la que el desnivel es tan pronunciado que no hay otra solución técnica". Por lo demás, afirmó, se utilizarán morteros de cal, "materiales totalmente adecuados", subrayó.
Ante la denuncia realizada por Concha Masa de la posible construcción de un centro de recepción de visitantes en una zona adyacente al castro y aún por investigar, el Consejero negó esta máxima. "No es cierto; en una fase posterior se plantea una actuación de señalizaciones y plataformas de observación, pero no se plantea la construcción de este centro que me dice". Además, negó impedimentos para que los investigadores accedan a los materiales depositados en el Chao Samartín, que se acogen "a los mismos términos que rigen para los depositados en el Museo Arqueológico de Asturias".
Finalmente, Genaro Alonso se comprometió a "tomar nota" de las preocupaciones manifestadas por Izquierda Unida, a "intensificar los estudios y a pedir nuevas garantías", para corroborar que "efectivamente el proyecto resulta adecuado". Y valoró positivamente la existencia de este proyecto, que supondrá más de 700.000 euros de actuación en el castro del concejo grandalés: "No sólo no hay motivo de preocupación, sino de satisfacción por el proyecto".
