La consejería de Desarrollo Rural y Recursos Naturales ha declarado el concejo de Boal como "zona tampón" en la lucha contra la plaga de la polilla guatemalteca, lo que supone unos compromisos para productores y comercializadores del tubérculo. Unas medidas que ha publicado el Ayuntamiento boalés en su página web.

Entre ellas, destaca la declaración de las parcelas a cultivar de manera anual, cuyos productores deben estar inscritos en el Registro General de la Producción Agrícola del Principado de Asturias (REGEPA). Las recolecciones y los traslados de patatas tendrán inspecciones oficiales y las entregas deberán realizarse en contenedores o vehículos cerrados o cubiertos con una malla. Asimismo, los comercializadores deberán llevar un registro de compradores.