La próxima apertura del faro de Cudillero como hotel de lujo es vista con "prudencia" por parte de la hostelería y hotelería local. La dirección de la asociación Cudillero Empresas de Turismo Asociadas (CETA), que reúne a la mayor parte de los empresarios del sector, no conoce de primera mano el proyecto "y por ello estamos expectantes y a la espera, porque lo cierto nos surgen muchas dudas". Todas ellas están relacionadas con la obra, su desarrollo y cómo afectará a un entorno protegido y a un rincón turístico por excelencia de la capital pixueta.
"Estamos estudiando con nuestros servicios jurídicos cómo se puede articular este desarrollo en un espacio protegido; hoy por hoy no sabemos cómo serán los accesos o cómo se gestionarán por ejemplo, los residuos", señala el secretario de CETA, Adharo García.
García entiende que la apertura suma una oferta de alojamiento diferente al concejo de Cudillero, "pero no podemos decir ya que estamos conformes con algo que no conocemos".
El colectivo se reunirá próximamente con el Alcalde, Ignacio Escribano (PP), para conocer el desarrollo del hotel, las singularidades de la obra y las obligaciones de la empresa concesionaria. "Es cierto que puede ser positivo para el concejo porque son dos habitaciones de lujo que no tenemos en nuestra oferta, pero no queremos que pase lo que sucedió en Ribadeo", señala García. Se refiere al faro de Isla Pancha, que no funcionó como se espera al principio al no poder ofrecer la concesionaria, según las informaciones que han trascendido hasta la fecha, el libre acceso al entorno.
Algunos hosteleros aseguran que este proyecto "puede sumar porque es cierto que aquí no tenemos paradores nacionales". Es la opinión de Patricia Arias, que tiene una casa de aldea en El Rellayo. "Digamos que atrae a un tipo de turista muy especial, porque imagino que los precios serán elevados; a nosotros no nos creará competencia". Por ejemplo, el precio de una noche en el hotel del faro de Isla Pancha de Ribadeo se oferta para esta Semana Santa por 600 euros.
El Alcalde de Cudillero ve este desarrollo con optimismo y cree que en este caso no surgirá la polémica. "Nos parece un proyecto fantástico para mantener vivos los faros", opina Escribano. "Trae más atractivo turístico, genera sinergias con otras empresas, y crea puestos de trabajo", añade. "Es una buena noticia para nuestro concejo", concluye.
Será la firma alemana Floatel la encargada de hacer y gestionar este desarrollo turístico. Tienen una concesión de 35 años y, de momento, se prevé una inversión de más de 300.000 euros. La ocupación es parcial, según informó anteayer la Autoridad Portuaria de Avilés. Se trata de 771 metros cuadrados de la parcela y 141 metros cuadrados del edificio. La empresa no podrá acceder a los locales técnicos, "que permanecerán de acceso restringido para el servicio de señalización marítima de la Autoridad Portuaria", ni las zonas comunes de acceso. Además, el planteamiento turístico tendrá que convivir, siempre según la Autoridad Portuaria, con los trabajos relacionados con la señalización marítima, hoy por hoy automatizados desde Avilés.
En el caso de Cudillero, está previsto además habilitar parcelas y terrazas "para desarrollar eventos de pequeño formato, posibilitando, en coordinación con el Ayuntamiento de Cudillero, el desarrollo de visitas guiadas".
El desarrollo turístico de los faros es una apuesta del Ministerio de Fomento. El gobierno nacional cree que estas concesiones son una oportunidad para generar riqueza en las zonas afectadas.
