La IGP del chosco de Tineo ha contraetiquetado en el último año 43.000 choscos, una cifra que, según el presidente de la IGP, Agustín Menéndez, duplica al producto elaborado bajo el sello de calidad de años anteriores. "Es un récord histórico para la IGP", señala Menéndez, que a partir de ahora se plantea trabajar en concienciar al consumidor de que "el chosco de verdad es el que lleva contraetiqueta" y en lograr que el embutido tinetense conquiste el oriente de Asturias.

La Feria de Muestras de Tineo es uno de los escaparates elegidos por la IGP del chosco para promocionarse y demostrar la versatilidad de su embutido. Para ello, además de degustaciones hacen un hueco a la cocina en directo con la organización del concurso "Masterchosco", que se celebró por segundo año consecutivo con la participación de tres alumnos de la Escuela de Hostelería del Instituto Valle de Aller. El pincho mar y montaña, con atún rojo y chosco, de Rosa María Cortina; el repollo relleno de chosco, de Javier Casado; y la fajita de chosco, de Vanesa Castañón, fueron los platos elaborados paso a paso ante el público.

La arriesgada elaboración de la tinetense Rosa María Cortina fue la ganadora del concurso. Ella confesó estar acostumbrada a cocinar con chosco, y aseguró que "si lo conoces bien es un producto que se presta a combinar con todo". En la misma línea lo definieron sus compañeros. "Todo el mundo lo come como un embutido, pero con él se pueden hacer muchas más cosas que la gente aún no se atreve", señaló Castañón.

"Con las demostraciones de cocina que organizamos nos sorprendemos cada día de que nuestro embutido pega con todo", enfatizó Menéndez, que apuntó que cada vez notan más que hay demanda de chosco entre los restaurantes, no solo de comida tradicional, sino de "alta cocina".