El Parque Natural de Somiedo se ha convertido en un laboratorio de estudio para universitarios de distintas especialidades. Jóvenes que acuden al concejo para investigar su flora y su fauna, la etnografía, su industria hidráulica o para utilizar el concejo como escenario para la creación audiovisual. Un goteo de grupos de universitarios y estudiantes en las últimas semanas que deja contento al sector hostelero con su presencia en alojamientos y restaurantes, comercios y actividades de ocio.
Uno de los últimos grupos en dejarse caer por Somiedo fue el viaje de estudios de los alumnos de Ingeniería de Procesos de la universidad alemana de Bochum, que ayer visitaron La Malva con Sandra Pérez y Jorge Robledo, trabajadores que guiaron al grupo. El objetivo de su visita a la central hidráulica fue "aprender los procesos" del funcionamiento de la planta, al tiempo que disfrutar de un paisaje "bonito", comenta Christine Schoenfuss, profesora.
Y se quedaron alucinados: "Es una pasada técnica, los canales subterráneos y todo en general, nos llama la atención dónde sacan el agua y cómo entra todo aquí, en este embalse tan bonito. Es lo más impresionante, cómo hace cien años pudieron hacer algo tan complicado", destacó la profesora. Estos próximos días conocerán otras industrias de la región, como una cementera, pero se centrarán en la minería, pues la Universidad de Bochum estudia la reconversión de las zonas mineras y cómo aprovechar el conocimiento generado para hacer cosas nuevas en los antiguos espacios de extracción, detalló Christine Schoenfuss.
Si la centenaria central hidráulica es un gran atractivo para los estudiantes de carreras técnicas, el entorno somedano es un aula al aire libre para los estudiosos del paisaje, la flora o la fauna, como los 24 alumnos de la Escuela de Ciencias Animales, Rurales y del Entorno de la Universidad inglesa Nottingham Trent, dirigidos por el español Antonio Uzal, doctor en Conservación Salvaje. "Hicieron observaciones en distintas localizaciones durante las que, pese a no observar osos, pudieron ver venados, corzos, rebecos, jabalíes, zorros, una marta, dos gatos monteses y numerosas especies de aves, más de cincuenta identificadas", comenta Uzal.
También hicieron muestreos de invertebrados en los ríos del Valle del Lago y en La Malva y dos investigaciones sobre vegetación e invertebrados terrestres. Además, colocaron cámaras en distintas sendas del concejo con las que pudieron fotografiar tejones, zorros y dos lobos. Unos trabajos de campo que combinaron con actividades de ocio y tiempo libre en Pola de Somiedo, donde estaban alojados. El pote de berzas fue el favorito en las comidas de los estudiantes, que se quedaron tan encantados con el concejo que prometieron regresar de vacaciones con amigos y familiares.
Y si el Parque Natural es atractivo para el cine profesional, como demuestra el rodaje de "Leggionaire's Trail", también lo es para los estudiantes de la Escuela de Cine de Madrid, que ruedan su cortometraje del trabajo fin de carrera grabando en varios puntos del espacio protegido como la braña La Mortera de Saliencia. Y es que en Somiedo se aprende de todo.
