Llovió ayer en Navelgas, pero esa circunstancia no frustró el concurso de potajes más famoso del Occidente. Hasta vino bien, pese a ser mayo y estar bien avanzada la primavera en el calendario, poder comer el plato estrella del invierno asturiano.

En esta edición concursaron con sus recetas diez mujeres, todas de Tineo o con lazos en el concejo. Si algo destacó de los diez platos que se sirvieron fueron los ingredientes. "Es todo de casa, lo que se hace aquí se cocina con ingredientes de primera calidad", dijo la ganadora del premio del jurado profesional, Josefa Rodríguez. El mejor potaje se cocinó ayer en Navelgas de la mano de esta mujer que aprendió la receta de su abuela. "Antes, era lo que se comía: potaje; por eso somos expertas", indicó. El segundo premio se lo llevó Aroa García (que también se llevó el del jurado popular). Ella se puso a los fogones antes de las ocho de la mañana, junto a su abuela Rogelia Martínez, para ofrecer al jurado profesional un potaje "de primera". Esta vez, innovó. Como le dijo una amiga de Belmonte, "un potaje es más rico si lleva un refrito de cebolla, ajo y pimentón". Aunque su receta no se llevó el primer premio, "parece que la idea gustó".

La vecina de Navelgas Teresa Fernández también tuvo reconocimiento. Su propuesta logró el tercer premio. "El secreto es tener buenos ingredientes", dijo.

La anécdota de la jornada llegó de la mano de las fabas que se utilizaron en los potajes. José Emilio Fernández, gerente del restaurante "La Allandesa" y ganador del concurso Mejor Pote Asturiano, destacó que "es un error cocinar un potaje con faba blanca. Se debe hacer con faba pinta, porque en Asturias la faba blanca se reserva para la fabada", explicó. Entre las ganadoras, el mensaje no tuvo éxito: "Echas las que tienes por casa", dijo la ganadora.

El portavoz de la comisión de Fiestas de Navelgas, Marcos da Rocha, destacó la afluencia de personas, pese a la lluvia.