El tapiego José Luis Terrón ha dado un paso al frente para encabezar la nueva directiva del Real Tapia, salvar al club de la desaparición y abrir una etapa donde, señala, debe imperar la unidad: "Soy la cabeza visible, pero todos vamos a trabajar juntos y a remar en la misma dirección".

El lunes, a las diez y media de la noche, tras varios días de reuniones, se cerró el equipo de ocho personas que tomará el testigo de la junta gestora que dirigió la entidad en los últimos cuatro años. Precisamente, Jesús Carbajales, el presidente saliente, es el único que repite en la dirección. Ocupará el cargo de vicepresidente, mientras que María José Jarén será tesorera y el secretario será Eugenio Méndez Prieto.

Terrón explica que, aunque Real Tapia solo hay uno, en los últimos tiempos había cierta independencia entre el primer equipo y las categorías inferiores, donde juegan más de un centenar de jóvenes. Esto es lo primero que quiere cambiar la nueva directiva, con el objetivo de trabajar con total unidad y una sola dirección para toda la entidad. En este sentido, una de las novedades será que todas las categorías, en la medida de lo posible, pisarán el campo A Xungueira, que ya no será la casa exclusiva del primer equipo. "Cuando era guaje recuerdo el orgullo que suponía jugar allí", precisa Terrón, convencido de que es algo que también debe experimentar la actual cantera del Tapia.

El nuevo presidente, que agradece el trabajo de sus predecesores, indica que están abiertos a colaboraciones e ideas para mejorar este club, fundado en 1947. Entre sus objetivos también está el aumentar los socios y trabajar para unir más a los clubes deportivos tapiegos: "Queremos que el pueblo se mueva con el deporte".

El Tapia cierra así las dudas sobre su futuro, algo que también ha hecho el Andés Club de Fútbol, que estrena directiva liderada por Óscar Fernández.