La Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) ha dado un buen susto en El Faedal (Valdés). La entidad que protege los derechos de propiedad intelectual reclama las tasas por cinco años de celebración de "las fiestas de La Milagrosa". Lo que ocurre es que en El Faedal, según los vecinos, "ni existe la Comisión de Fiestas de La Milagrosa ni la tal fiesta de La Milagrosa".
Lo explica la organización de de 'Las Flores de Mayu', que ha hecho pública la misiva que envió la sociedad. En la carta, la SGAE advierte del inicio de acciones legales si no hay contestación o solución dialogada al importe reclamado.
En El Faedal, esta situación sorprende. "El caso es que están mal informados", explican. Y es que en esta localidad valdesana, añade, hay dos asociaciones, "y ninguna tasa a los grupos u orquestas el repertorio que tienen que tocar, o no hasta ahora". En este sentido, los vecinos aseguran que la Sociedad General de Autores no ha generado derechos y que, por tanto, el pueblo no tiene por qué pagar las tasas. "En 'Las Flores de Mayu' no traeremos a otro solista o grupo musical que no firme un contrato en el que expresamente se comprometa a no interpretar ni una sola canción sujeta a tasas por derechos de autor", señalan.
Se da la circunstancia de que esta localidad celebra la Flor de Mayo los primeros días del mismo mes. La SGAE señala en su página web que es necestario tener autorización "si se utilizan obras protegidas". "Somos conscientes de que es imposible conseguir uno por uno el permiso de todos los autores (...) para poder utilizar cualquier obra musical o audiovisual que forme parte del repertorio de la SGAE, ya sea nacional o extranjera. Con nuestra licencia podrás disfrutar de dicho repertorio".
"Las Flores de Mayu" tienen un marcado carácter folclórico. Este año, el acto estrella fue el hermanamiento entre el grupu etnográficu "Fonte la Faya", de la misma braña del Faedal, en Valdés, con la Associação Etnográfica "Os Serranos", de Belazaima do Chã (Portugal).
Otros pueblos de la comarca también se exponen a situaciones económicas comprometidas por las tasas que reclama la SGAE. Novellana, en Cudillero, es uno de ellos. No pagó lo que pedía la Sociedad General de Autores y el juicio dio la razón a esta entidad. Condenó al organizador a pagar 10.800 euros, una circunstancia que compromete la continuidad del festejo.
