A todos nos entra en algún momento la gusa, las ganas de picar algo antes de comer o de cenar. En ese instante, cualquier cosa que se nos pase por delante puede ser susceptible a ser ingerida, pero por alguna extraña razón pocas veces acostumbra a ser algo saludable.

Los nutricionistas defienden cinco comidas al día, incluyendo el aperitivo y la merienda, para saciar el hambre y no llegar a la siguiente comida con un apetito voraz. Pero comer algo a media mañana y a media tarde o picar entre horas, puede resultar saludable si seguimos una serie de consejos.

Elegir bien lo que se come

Picar entre horas no implica consumir comida rápida o con alto contenido en grasa. La fruta, el yogur desnatado, los frutos secos o el embutido bajo en grasa son nuestros grandes aliados para llenar el estómago sin coger kilos de más. Si te apetece comer un snack hazlo pero en cantidades pequeñas: la regla de oro está en no superar las 200 calorías.

Mira las calorías de los paquetes

A la hora de elegir un snack es importante medir las raciones, y por otra parte, observar cuántas calorías tiene. Lo aconsejable para no sumar kilos es no superar las 200 calorías por snack. Si en ese instante, no nos apetece tomar fruta, podemos decantarnos por unas patatas o unas galletas, pero midiendo las cantidades, que sean pequeñas.

El agua, la mejor amigo del cuerpo

El agua es vital para nuestro organismo, quita la sed, nos ayuda a ir al baño, no engorda, es saludable... en definitiva, es el mejor líquido para nuestro cuerpo. Así que intenta no sucumbir a los refrescos, aunque sean light. La mejor opción para acompañar el picoteo o las comidas es el agua.

Come despacio

Masticar tranquilamente y saborear cada bocado nos ayudará a terminar nuestro picoteo con sensación de saciedad. Si tragamos apresuradamente y casi sin degustar, terminaremos de comer con la misma ansiedad con la que hemos empezado y querremos otra porción más.

Come después de haber hecho ejercicio

Hacer ejercicio nos ayuda a controlar la ansiedad y a reducir las ganas de comer. Los expertos afirman que picar algo media hora después de haber hecho ejercicio es bueno para nuestros músculos, que necesitan recuperar fuerzas. Además, podemos consumir carbohidratos (que no superen las 200 calorías) sabiendo que nuestro cuerpo lo quemará con facilidad.

Siéntate en un lugar tranquilo

Una vez hayas elegido tu "picoteo", siéntate en un lugar tranquilo, alejado de la cocina y disfruta de tu comida. Si permaneces cerca de la nevera, es muy probable que vuelvas abrirla una vez hayas finalizado la ración. Si estás comiendo una bolsa de patatas, ponte en un plato un puñado, no más de 200 calorías. Si permaneces con la bolsa abierta, acabarás con la bolsa entera. El truco reside en prepararse el tentempié y consumirlo en una zona tranquila.

Prepara tu tentempié en casa

Si la hora del almuerzo o de la merienda nos coge trabajando o estudiando, es mejor que seamos previsores y lo llevemos preparado desde casa. De esta forma, evitaremos recurrir a las máquinas de vending y comeremos algo más saludable a la par que económico.

Picar entre horas es saludable, si se hace bien

Tal como afirman los nutricionistas, picar entre horas es necesario si se hace de una forma saludable. Además, si estamos intentando perder peso es vital que no nos saltemos ninguna comida, tampoco estos picoteos entre horas ya que nos ayudarán a tener el estómago lleno e ingeriremos de forma moderada la siguiente comida.