Estoy francamente harto de ver cómo algunos elevados cargos del partido se creen con el sacrosanto derecho a decir todas las inconveniencias que estimen oportunas mientras que al resto de los militantes del Partido Popular se nos pide disciplina y discreción. Esto tiene una cierta lógica dentro de unos límites, pero en las circunstancias actuales y una vez traspasados esos límites no me da la gana de estarme callado. Las declaraciones del Presidente de Honor del Partido Popular, Sr. Aznar, tras los resultados electorales en Cataluña no han podido ser más desafortunadas, sobre todo por la forma en que se han hecho. Tengo que expresar mi más enérgica repulsa porque evidencian una deslealtad enorme con el Presidente Rajoy, sobre todo por venir de un expresidente de Gobierno. ¿Pero qué se cree Aznar? ¿Que el resto de los militantes del partido o el propio Presidente Rajoy somos tan tontos que no somos capaces de reflexionar sobre esos resultados? Pues bien yo tengo que recordarle al Sr. Presidente de Honor que muchos le dimos nuestra lealtad en momentos muy difíciles, precisamente porque éramos conscientes de que en momentos difíciles hay que cerrar filas y lavar los trapos sucios dentro de casa. Hay que seguir la máxima evangélica de que una casa dividida contra sí misma no prevalecerá. Le recuerdo al Sr. Aznar, excelente presidente durante una legislatura y media, que en su última parte tuvimos que aguantar una soberbia insoportable con actitudes y fastos personales que a la gran mayoría del partido nos dejaron sin respiración y nos resultaban inexplicables? ¡y defendimos al Presidente! Que tuvimos que soportar una crisis en Galicia durante el "Prestige" donde defendimos a capa y espada inexplicables ausencias iniciales y que precisamente fue nuestro actual Presidente, D. Mariano Rajoy, el que desde el principio estuvo presente dando la cara por un gobierno a ratos ausente? ¡y defendimos al Presidente! Que defendimos reformas y acciones de las que no se nos daba la más mínima explicación? ¡y defendimos al Presidente! No sigo. Simplemente recordaré aquí que no fue el actual Presidente el que sacrificó a un Alex Vidal-Quadras en aras de un compromiso con el señor Pujol sacándolo de Cataluña para enviarlo al Parlamento europeo. Tampoco fue este Presidente el que retiró a la Guardia Civil y Policía Nacional de Cataluña ni el que hizo numerosas transferencias a la Generalitat. ¿A qué viene ahora dar estas pretendidas lecciones de rigor Constitucional a un Presidente que no ha cedido ni un ápice ante el empuje secesionista? Hay otras maneras de hacer las cosas; existen los teléfonos si se quieren dar opiniones leales. Hacerlo antes de unas elecciones generales a través de la FAES y públicamente es muy, pero que muy desleal. Soy gallego y ahora tengo que recordar que otro gallego hace ya muchos años le hizo un traspaso de poderes al Sr. Aznar "Sin tutelas ni tu tías". Ser ex Alto Cargo tiene sus servidumbres y entre ellas está la de la discreción, pero también se le presupone generosidad. Pues eso, yo también voy a ser impertinente: Aznar? ¿por qué no te callas?
