La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Cien líneas

El Musel dicta la agenda

La fiscalía pide otras 16 imputaciones en relación con el candidato a fraude del siglo

El puerto de El Musel marca la agenda asturiana por no decir que preside la actualidad regional que sería mucho más acertado pero mejor no jugar con las palabras.

La fiscalía acaba de pedir la imputación de nada menos que 16 responsables -suma y sigue- de la UTE Dique Torres que realizó el grueso de los trabajos del puerto. Para entendernos, en ese rúbrica se asocian ACS, FCC y otras grandes constructoras.

La UE quiere revocar los 247,5 millones de fondos europeos con que subvencionó las obras de El Musel. Esa cantidad es más de la cuarta parte de los 901 millones de subvenciones europeas que la Oficina Europea de Lucha Contra el Fraude, la famosa OLAF, recomendó el año pasado recuperar en el conjunto de las investigaciones realizadas en ese ejercicio.

Un supuesto súper fraude: más de la cuarta parte de las subvenciones en entredicho, según investigaciones de 2014, corresponde al puerto.

La agenda asturiana está más que marcada por ese hecho. El PSOE se quedó sin la alcaldía de Gijón en junio porque Podemos no se fía de lo que hizo en El Musel. Y de paso, la carambola en Oviedo: Javier Fernández -cada día me cae mejor- prefería mil veces a Agustín Iglesias Caunedo en la poltrona de Carbayonia que a Wenceslao López. Y Rivi no digamos.

La denuncia partió del Observatoriu Ciudadanu Anticorrupción de Asturies. Ana Taboada, de Podemos y vice alcaldesa de Oviedo, forma parte de esa plataforma. No me extraña que la odien y pidan su dimisión por un quítame allá esas pajas.

Los tentáculos habituales no sirven para ahogar el escándalo -como parece que el Régimen sí va a lograrlo en el tinglado de Riopedre, la Roldana y compañía- porque el asunto está en Bruselas y los caciques de esta Albania no llegan tan lejos.

Bueno, quizá con Pedro Sánchez en la Moncloa lo consigan. Mientras tanto, todo gira en torno a El Musel. Vaya mareo.

Compartir el artículo

stats