Estamos por pensar que la alcaldesa de Gijón ha adelantado este año la instalación de las luces navideñas con la excusa de reclamarle mañana el aguinaldo a la ministra de Fomento, que llega a la ciudad con el proyecto de la estación intermodal bajo el brazo. Puede que, incluso, los supermercados gijoneses hayan dispuesto con antelación el escaparate de mazapanes y turrones para que Moriyón haga acopio de dulces y ambrosías para agasajo de la señora Pastor y su secretario de Estado. Vuelve la titular de Fomento en vísperas de Navidad y esperemos que no traiga carbón en la saca, que ya es bastante con el que ventea El Musel. Mejor que deje dinero y plazos o se puede armar la marimorena. Brindemos por que el consejo de Gijón al Norte certifique buenas noticias para la agilización definitiva del plan de vías. Sea con sidra asturiana, orujo gallego o agua de borrajas.