La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

LNE FRANCISO GARCIA

Billete de vuelta

Francisco García

La mujer trabajadora

No me cuenten a mí qué es una mujer trabajadora: conozco a una desde niño. Sin un salario fijo, sin un día de descanso, con jornadas interminables de trabajo, de sol a sol, sin vacaciones. Sin saber dónde queda el mar, más allá del océano de trigos y cebadas de su pueblo mesetario. Fregando suelos ajenos, escardando cebollinos, rebuscando aceitunas en el olivar para llevar a la almazara en sacos a cambio de unos litros de aceite, planchando con esmero impolutas camisas... Cuidando hasta las últimas horas, amorosamente, sin desmayo, de sus mayores, pese al dolor físico y la angustia de la cercana despedida; velando por todos, grandes y pequeños, sin aguardar premio a cambio. Y aún había tiempo para educar a los hijos con las normas nada estrictas y bien sencillas del sentido común, que los padres de ahora no alcanzamos a descifrar. Esa mujer que me enseñó a rezar, que me empujó a leer, que me animó a soñar, es de quien hablo.

Compartir el artículo

stats