La historia de la humanidad está compuesta de pequeños logros; en matemáticas decimos de "logros infinitesimales". No seré yo quien dé un curso resumido de historia, pues eso sería un ejercicio de erudición, y yo no soy un erudito, sólo un ser que piensa; pero creo que cuando la humanidad inventó el cero abrió la caja de Pandora. Los números naturales, que empiezan en el uno nacieron para poder contar, por ejemplo el número de ovejas, y que no se perdiese ninguna. Los números naturales son un conjunto infinito numerable, porque aunque posee una cantidad sin límite de elementos se pueden contar. No obstante, no lo intenten porque no terminarán nunca. Además, los naturales responden al axioma que dice que si un número es natural el siguiente que resulta de sumarle uno también lo es. El cero es un número que se llama entero, conjunto que implica la capacidad de perder o de quedarse a pre. La sociedad que inventa el cero es ya una sociedad capitalista. Luego llegarán los números racionales, la capacidad de repartir, la miseria y el comunismo; y los irracionales, que eran mayoría y estaban ahí agazapados sin decir nada.
El cero sabe de derechas y de izquierdas. Todo el mundo quiere muchos ceros a la derecha en su cuenta bancaria, y algunos que lo consiguen envían estos ceros a unos países que son los paraísos de los ceros viajeros, donde los cuidan otros ceros, esta vez a la izquierda, que se llaman testaferros. Y aquí se quedan los números racionales: tan repartidos que casi no da para nada; y los irracionales, porque al final para continuar tenemos que pedir dinero prestado a los ceros viajeros, que obviamente vuelven para ayudarnos y hacer frente a nuestras deudas, que son crecientes. Digo "nuestras", aunque yo particularmente no he participado en este guateque, pero cuando abro la boca me dicen que me calle, que así funciona el Estado del bienestar. ¿Entienden ahora cómo funciona la marca España? La avaricia hace mucho tiempo que se ha globalizado.
Cero-héroes es el concepto que en Estados Unidos algunos hospitales han creado para minimizar los daños al paciente por actuaciones médicas indebidas. La Agencia Tributaria debería tomar nota y explicar que no queremos héroes, sino ciudadanos que ayuden con sus impuestos a sostener las arcas públicas, que además deberían estar bien gestionadas, y así repartiríamos menos gastos y generaríamos más actividad económica. ¿A que así no parece tan difícil la Economía? Obviamente a Montoro este traje le queda largo, y parece más bien un personaje del señor de los anillos. Como dice una amiga mía: ¿Quién podrá haberse casado con este señor? En fin, como dicen los americanos: "if it smells like shit, it is shit" (si huele a mierda es que es mierda), caiga quien caiga ("rules are rules").
Pero hoy no quiero hablar de toda esta corrupción que nos jalona, quiero hablar de CER.O.4, la feria de cerámica contemporánea de Oviedo, que tendrá lugar este próximo fin de semana en un marco incomparable, como la antigua plaza del pescado de Oviedo, o plaza de Trascorrales, en su cuarta edición. Da la casualidad que uno de los primeros ceros se halló en la antigua Mesopotamia, escrito en unas tablillas de cerámica. La cerámica marca pues el origen de nuestra civilización y también marcará su declive. Tienen la ocasión de comprender, apreciar y negociar obras de cerámica como parte del arte contemporáneo, que desgraciadamente no podrán ver en los museos de nuestro país, que han pasado de la pintura al performance, sin solución de continuidad. Esto es, sin embargo, diferente en otros países de nuestro entorno o incluso Estados Unidos, que siempre han considerado la cerámica como parte del arte clásico y contemporáneo. Los museos en estos países son espacios abiertos, no mausoleos, que trabajan con los niños, desde sus edades más tempranas, proporcionándoles una visión no clasista del arte, y una interacción con la materia con sus manos y también con sus pinceles. Esta situación es paradójica en un país como España, que posee una gran tradición alfarera, y en una región como Asturias, que poco a poco ve desaparecer sus alfares. Faro es un claro ejemplo en el municipio de Oviedo. Estados Unidos es otra vez en este tema diferente y da lecciones a Europa en el mercado y en la docencia del arte. No importa lo que eres, sino lo que quieres hacer, y sobre todo lo que haces.
Dicen que la creatividad solo posee un camino. Puedo afirmar que la inteligencia también. Arte o artesanía: esa diferencia no existe, sólo existe la intención. Sin embargo arte, artesanía y oficio van juntos, como Zipi y Zape, o Mortadelo y Filemón. ¡Ibáñez, tú sí que eres un artista! Quién iba a decirnos que en 2016 viviríamos en 13 rue del Percebe. Hoy, el botones Sacarino también sería un testaferro. ¡Te olvidaste del "bigotes" y de alguna mujerona emperifollada! Ambos quizás se dedicarían al "money-laundering" en el mercado del arte.
En definitiva, señores y señoras y gente del pueblo llano con sensibilidad, reserven este fin de semana, y disfruten del arte cerámico con mayúsculas. Y compren arte a un precio inigualable, no sean tan simples como aquel que un día me dijo que la cerámica se rompe. Piensen que quizás la realidad de la pieza sea la tensión y que ésta alcanza su cénit cuando rompe, aunque no tiene por qué. En definitiva, las pérdidas de objetos sólo nos educan para asumir futuras ausencias, mucho más importantes. Yo lo sé desde 2005.
