La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

andres montes

Soluciones Rivera

Albert Rivera ha conseguido una buena cosecha de desdén con su propuesta de avanzar hacia un Gobierno encabezado por un independiente para evitar nuevas elecciones y acabar con este período de pesada inmovilidad. Es la primera vez que alguien levanta la cabeza por encima del barro y sugiere explorar opciones distintas a las manejadas sin resultados, de forma pertinaz y cansina, durante los cuatro meses transcurridos desde las elecciones de diciembre. Los recursos de quienes han de resolver esta situación se han reducido tanto, la política nacional se ha vuelto tan elemental y primaria que la sugerencia de Rivera pasa por salida estrafalaria y desesperada.

Como hombre sin partido que es, el líder de Ciudadanos juega con la ligereza de equipaje de la que no gozan quienes arrastran tras de sí el peso de organizaciones muy fraguadas. por eso puede permitirse ir más allá que el resto sin exponerse a que los propios castiguen su osadía. Ahora además, Rivera intenta transformar en favorecedor cartel electoral su perfil de hombre abierto a soluciones, empeñado en buscar un entendimiento que, a una semana de que se consume el fracaso de la política, tiene ya el tono de lo imposible.

Una cosa es aceptar que la ambición de poder actúa como un motor natural de la política y otra que exhibiciones impúdicas de ese afán, como las vistas en estas semanas, no generen rechazo entre los electores. Rivera lo sabe y por eso cultiva esa cara de hombre desprendido en aras del acuerdo. Lo que significa que algunas de sus propuestas son a la vez un intento de evitar nuevas elecciones y un preparativo para ese escenario que quiere evitar.

Con las consultas del Rey a los partidos entramos el lunes en la senda de lo irreparable. Aunque se pusiera sobre la mesa una inesperada solución apenas queda ya margen para cumplir con los tiempos legales. La convocatoria de nuevas elecciones será la constatación de la incapacidad de los de siempre y los de ahora para avanzar en nuevas soluciones políticas.

Compartir el artículo

stats