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LNE FRANCISO GARCIA

Billete de vuelta

Francisco García

El congreso de los vivos

Está por ver si la sentencia de la Audiencia Provincial que resucita el último cónclave local del PP -el congreso de los muertos vivientes- sirve para acallar las escaramuzas cainitas que socavan los cimientos del partido que lideró el voto conservador gijonés durante décadas. Como contra la decisión judicial dada a conocer ayer no cabe recurso, a Mariano Marín y su equipo corresponde ahora la responsabilidad de partir de cero, ganar la sede -donde permanecen capillas y banderías- y ganar la calle. Sobre todo la calle, que es preciso pisar para recuperar el espacio político perdido a manos de Foro, que supo aprovechar, con mejor cartel, los enfrentamientos internos y la carencia de pulso de los populares de esta ciudad.

Nadie puede aventurar cómo estaría conformado hoy el salón de plenos si en junio de 2011 el grupo municipal del PP no hubiera alzado gratuitamente a Carmen Moriyón al sillón de la Alcaldía. Seguramente Foro habría dejado de existir o tendría una presencia testimonial, y los populares habrían acarreado, con vientos más favorables, mejor cosecha en 2015 que la tan exigua de tres concejales.

De alguna forma, lo que ha hecho el PSOE a nivel nacional, absteniéndose para que gobierne Rajoy, es lo contrario de lo que hizo el PP en Gijón, entregando su voto a Foro para evitar un nuevo mandato de izquierdas. Y a la vista de la factura que los populares pagaron por esa decisión, tal vez los socialistas hayan acertado, ante el temor evidente de ser fagocitados por el populismo creciente.

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