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Alberto Menéndez

Demasiada parsimonia

Puede que sí, que sea verdad y que los partidos políticos asturianos estén haciendo todo lo posible para que la comunidad autónoma tenga Presupuestos el próximo año. Pero lo cierto es que la imagen que están dando ante la opinión pública, reunión tras reunión, es de apatía, de que aparentemente les da igual lo que pueda pasar con las cuentas regionales. Porque, si realmente hay una apuesta fuerte por la negociación, ¿es lógica la parsimonia con que se está abordando el asunto, sobre todo por parte de quien más interesado debería estar en desbloquear la situación, que no es otro que el Gobierno del Principado?

Que en las reuniones iniciales en busca de un posible acuerdo presupuestario las diferentes fuerzas parlamentarias se encastillaran en sus posturas no sólo es legítimo, sino que es hasta lógico. Lo malo es que ha pasado el tiempo -demasiado tiempo- y no hay movimientos serios -lo que implica renuncias, cesiones por algunas de las partes- que hagan presuponer que la negociación avanza. Más bien la sensación que hay es que todo sigue tan estancado como cuando se abrieron las rondas de contactos. La semana que viene los consejeros desgranarán las cuentas en la Junta General pero con las dudas más que razonables de si no serán horas perdidas.

Por supuesto que aún hay tiempo para llegar a algún tipo de pacto que le permita al Ejecutivo socialista de Javier Fernández contar con Presupuestos en 2017. Pero a diferencia de lo defendido insistentemente en los últimos meses por el jefe del Gobierno, la solución no parece que vaya a pasar por Podemos y, por lo tanto, tampoco por IU. Al final, o hay acercamiento al PP, y de paso también a Ciudadanos, o habrá prórroga presupuestaria.

Un acuerdo PSOE-PP (del tipo de que sea, eso da igual) es lo que busca con su actitud la dirección regional del partido morado. Concluir que la "vieja política" no distingue entre socialistas y populares, que son lo mismo, ése es su mensaje prioritario. Salvo que el PSOE se plegase a todas sus exigencias, es decir, que le cediera el protagonismo. Quizás haya socialistas dispuestos a ello, entre los que, por supuesto, no se encuentra Javier Fernández, quien, por otro lado, tampoco quiere darle a los podemistas la carta de la aproximación a los populares. ¿Callejón sin salida? En días, la solución.

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