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Director gerente de la Empresa Municipal de Aguas de Gijón (EMA)

El saneamiento no tiene quien le escriba

¡Ay, pobre del agua que del fondo mira,

tal vez envidiosa, quizás dolorida!

Juana de Ibarbourou

El encargado de aquella obra fue llamado a compartir el estrado con los prohombres que la habían hecho posible. Salió con timidez y se colocó junto a ellos para recoger el premio otorgado en su quinta edición a la mejor obra pública de los países iberoamericanos de los dos últimos años. Él había sido uno de los actores, secundario sí, pero se estaba reconociendo su trabajo junto al de los técnicos del Ministerio, al de los catedráticos de la Escuela de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de Santander que habían redactado aquel proyecto y al de sus superiores en el escalafón de la constructora Ferrovial. Allí, en el edificio histórico de la Universidad de Oviedo estaba un hombre que probablemente no habría soñado nunca pisar un recinto universitario si no fuera para repararlo. Sin embargo el Premio Puente de Alcántara había sido concedido al redenominado como viaducto Pintor Dionisio Fierros, que salva el río Cabo, límite de los concejos de Cudillero y Valdés.

Se llamaba Luis y era de alguna comarca del oeste de Zamora, Sayago o Aliste. De mediana edad, soltero, moreno y enjuto, su apellido se ha perdido en mi memoria pero no el apodo con el que todos lo conocíamos: El Figura. A veces la justicia se hace verdaderamente poética ya que le correspondía pasear por el mismo edificio en el que su paisano Leopoldo Alas había dado clase de derecho natural y a pocos metros de donde éste, en su más conocida novela, había ubicado el caserón de los Ozores. Y para cerrar el círculo, el muy jovellanista ingeniero director de todo aquello había dado el nombre de La Regenta al arco del viaducto entonces premiado.

Anteriormente Luis había estado trabajando en obras de saneamiento. Formaba parte de los equipos a los que de forma injusta y despectiva llamábamos en la empresa la brigada de la m? ( No seré más explícito). Entre zanjas y entibaciones hacían obras sacrificadas, nada lucidas y en condiciones penosas. En ocasiones era y es necesario mantener el servicio del alcantarillado en paralelo con la nueva red y hay que vérselas con lo que viene arrastrado por las aguas que soltamos por baños y fregaderos.

Ni ese tipo de obras, ni otra alguna de depuración de aguas residuales, han sido merecedoras de premios como el Puente de Alcántara que sí ha sido otorgado a infraestructuras de embalse o de regadío. El agua limpia ha sido inspiración de poetas y canciones y hasta de nombre de algunos grupos, "Aguaviva" o "Creedence Clearwater Revival", y comportan cualidades siempre agradables de frescor o pureza. Pueden ser incluso turbulentas como las del puente de Simon y Garfunkel, e incluso profundas o frías, pero en todo caso jamás desagradables. Por contra las aguas residuales no tienen ni quien las cante ni, como al coronel de Gabo, quien las escriba. Todo lo más reseñas puramente técnicas en alguna revista especializada.

Las metáforas del sector de la ingeniería sanitaria siempre conllevan connotaciones negativas. Hablamos de cloacas de tal o cual organización, de asuntos turbios, de pozos negros? Hasta la propia disciplina ha cambiado su apelativo por el de ambiental. Hay que irse a la lengua del imperio ahora dominante y decir "outlet" para que referirse a las tiendas que dan salida a artículos descatalogados o defectuosos no suponga un demérito. A ningún comerciante se le ocurriría nombrarlas por su equivalente en castellano, desagüe, pero por si alguno recoge la idea le aporto otro término tan hermoso como desusado, albañal, de origen árabe como alcantarilla y tantas otras palabras de nuestro rico idioma.

Este año la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo ha determinado que en ésta su vigesimoquinta edición el Día Mundial del Agua se dedique a las aguas residuales. Trata de que las recojamos y reutilicemos de forma eficiente y segura, a la vez que nos recuerda que el mejor tratamiento es el ahorro en el consumo. Da datos significativos como que el 80% del agua que consumimos en el mundo se devuelve al medio sin tratamiento alguno, o que 1.800 millones de personas usan fuentes de aguas contaminadas por coliformes fecales que son origen de enfermedades como tifus, disentería, cólera o polio. En diciembre el conocido científico Stephen Hawking publicó un artículo en "The Guardian" titulado "Éste es el tiempo más peligroso para nuestro planeta" en el que entre otras reflexiones decía que "en el África Subsahariana el acceso de la población a un teléfono está más extendido que al agua potable". Esto, que es un avance visto desde el lado de la tecnología con las oportunidades que ello comporta, nos pone frente a la urgente necesidad de solventar tan primaria carencia.

Desde la Empresa Municipal de Aguas de Gijón nos hemos unido a la iniciativa de la Asociación Española de Abastecimiento de Agua y Saneamiento de dar a conocer nuestras instalaciones de depuración. Dedicaremos parte de la mañana de hoy para mostrar a nuestros convecinos cómo funcionan el alcantarillado, la depuración y el vertido de las dos cuencas que conforman nuestra particular mesopotamia entre el Piles y el Aboño. Visitaremos la EDAR de La Reguerona y enseñaremos, en especial a los vecinos del entorno de la calle Brasil, el tanque de tormentas que hay en la zona centro como modelo semejante a los que construiremos en El Arbeyal y en el Parque de los Hermanos Castro. Queremos que, a diferencia de lo que dice la canción de Ana Belén, no haya gotas de lluvia que vuelvan a ser lágrimas tristes en la inundación. Acudiremos también a diversos colegios del municipio para que los más pequeños escuchen nuestras recomendaciones para ahorrar agua y hacer un uso adecuado de ella.

Un buen número de nuestros compañeros de la EMA trabajan cada día en mantener los sistemas de alcantarillado y en las tareas de operación, mantenimiento y control de la plantas de El Pisón y Aboño. Como le ocurría a Luis El Figura, muy a menudo esos trabajos son fatigosos y desagradables y no cuentan con el reconocimiento que merecen. A quienes abnegadamente llevan a cabo esa labor les dedicamos la jornada de hoy. Personas sencillas como aquéllas de las que Machado dijo que "Donde hay vino, beben vino; donde no hay vino, agua fresca". De la EMA, claro está.

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