-Hola, buenos días. ¿A qué hora abrís la tienda, ho?
-Si ye festivo, ni se moleste.
-¿Eh?
-Si ye por entre semana, asegúrese de mirar ónde hubo fiesta...
-¿Qué?
-Si fuimos de romería, cerramos al otru día.
-¿Cómo ye, ho?
-Tamos en horario de verano.
-Ah. Ye que pasé pola mañana y taba cerrao.
-Si viene antes de las 10, vuelva a las 11...
-¿Eh?
-Si viene después de las 11, taremos en la escalera 12...
-¿Cómo ye?
-Si viene después de las 12 taremos tomando un pinchín hasta las 13.30 o así.
-¿Pero a qué hora abrís, ho?
-Si nun ta pa playa, búsquenos na terraza, si orbaya taremos na barra...
-Ye que necesito recoger el ordenador que vos dejé pa reparar.
-Si ye urgente, contáctenos por guasap.
-¿Qué guasap ni qué mi madre, chaval? ¿A qué hora abrís la tienda?
-Si tenemos gente en casa, igual los llevamos a Covadonga y abrimos un ratín de tarde.
-¿Un ratín? ¿Pero cómo ye lo tuyo?
-Si fai calorón, toi fundíu. Si ta nublao, tengo poca gracia...
-¡Oye, chaval!
-Si tira mucho l'airón, vamos pal interior.
-¿Pa ónde, ho?
-Andaremos por Oviedo, y abrimos luego, de la que venimos, a no ser que llame la mi cuñada y de Gascona tiramos pa las fiestas de Trasona.
-¡Home, no me jodas!
-Si nun ye urgente...
-¿Y entós, a qué hora abrís, ho?
-Abrimos cuando venimos.
-Bueno, ya... ¿Y a qué hora cierras?
-Cerrar, cerramos cuando marchamos.
-¡Pero vamos a ver, ho! ¡Toi diciéndote que fui tres veces y taba cerraooo!
-Si vien y nun tamos ye que no coincidimos.
-¿Pero el ordenador tá arreglau, ho?
-Si tien arreglu s'arreglará, si nun lu tien arregláu ta.
-¡Oye, chaval! ¿Tu qué quies, tocame los cojones?
-Si quier que se los toque pulse 1, si quier...
-¡Vaya güevazos que tenéis, compañeru!
-Si quier consultar nuestra oferta...
-¡Tenéis una tienda y nun miráis pa ella!
-Si quier dejar alguna sugerencia...
-¡Lo que quiero ye que me devolváis el ordenador!
-Ningún problema. Pase por la tienda, señor.
-¿A qué hora abrís la tienda, ho?
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