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Tino Pertierra

Sólo será un minuto

Tino Pertierra

A costa de los mosquitos

Sergio: "Un mosquito zumbando. Estereofónico. Me despierta de madrugada. Un mosquito a finales de octubre. No es normal que haya zumbidos a estas alturas del año en la oscuridad. Pero los hay, y los hay porque hace un calor bochornoso. En el Norte. El Norte sofocado. Y un mosquito alza el vuelo para bombardearme con su maldito sonido despertador. Siempre me he preguntado por qué un insecto tan insignificante tiene un sonido tan significativo. Tan estruendoso en medio del silencio. Y me despierta. Me ronda después de haber tenido un extraño sueño en el que buceaba con mi jefe. Mi jefe con traje de buzo es ciertamente cómico. No como en la vida real. Mete miedo. No le respetamos pero nos asusta. Y él lo sabe. Incluso en sueños: antes de que el mosquito me despertase estaba a punto de ensartarme con un arpón. La causa: había cometido un error en un balance. El mosquito que sobrevuela mi cara me salvó la vida. Mis sueños son muy realistas, seguro que hubiera sentido de verdad el arponazo. El zumbido se detiene. ¿Ha encontrado un lugar donde aterrizar? En el fondo, siento compasión por él. Finales de octubre y desorientado. El maldito calor. El maldito cambio climático. Ayer discutí con un compañero por eso. Decía que son todo patrañas, que siempre hubo cambios del clima bruscos, que los ecologistas son unos vendemotos al servicio de intereses económicos que no sabía identificar pero que seguro que existen. Mi compañero colecciona teorías conspiranoicas, así que es normal que acepte la del cambio climático como una de las más consistentes. Lo habitual es que no entre al trapo con mentes tan raquíticas, pero ayer me dolía la cabeza y la espalda, mi jefe me había reñido en público y la máquina de bebidas se había tragado mi dinero sin darme a cambio los cacahuetes fritos con miel. Así que le dije cuatro cosas y se fue muy ofendido. Ladeo la cabeza y el mosquito levanta el vuelo. Doy un manotazo en la zona donde suena su zumbido. Silencio. Me duele la cara, pero creo que alcancé mi objetivo. Dolor y alivio. La historia de mi vida contada por un mosquito".

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