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Carmen Pérez Novo

La importancia de la fibra

El papel en el cuerpo humano de un eficaz regulador del tránsito intestinal

La fibra es un constituyente natural de la pared de las células vegetales, que no se puede digerir, y que contribuye a aumentar el volumen de las heces, siendo, por todo ello, un eficaz regulador del tránsito intestinal. Como los productos que la contienen son siempre de origen vegetal, una dieta rica en fibra ayuda a mantener estables las cifras de colesterol en sangre, evita el estreñimiento y previene la aparición de hemorroides, patología muy frecuente y molesta. Por otra parte, los principales efectos no deseados, son la flatulencia (molestia debida a la acumulación excesiva de gases en el aparato digestivo) y el meteorismo (abultamiento del abdomen por la acumulación de gases en el tubo digestivo), que pueden llegar a ser incómodos en algunas personas que los padecen y que suelen ceder con la toma continuada de la fibra. Lo idóneo es ir acostumbrando poco a poco al tracto intestinal a la aparición de la fibra alimentaria e ir ingiriendo a la vez pequeñas cantidades de líquido.

¿Y dónde podemos encontrar la fibra? Pues, fundamentalmente en los cereales (arroz blanco e integral, pan blanco e integral, pasta, harina de trigo e integral), verduras (espinacas, judías verdes, acelgas, patatas, tomates, zanahoria, puerros), frutas (naranja, manzana, pera, plátano, kiwi, cerezas, fresas, mandarinas....) y legumbres (guisantes, lentejas, garbanzos, soja en grano).

Si tenemos en cuenta que el estreñimiento es un contratiempo muy frecuente en el sexo femenino y uno de los principales en la mujer embarazada -la progesterona relaja la musculatura intestinal y ralentiza su tránsito, con lo que se dificulta la evacuación, sobre todo al final del embarazo, debido a la presión que ejerce el útero gestante sobre el recto-, el incluir fibra en la dieta es una de las principales normas que deben tener en cuenta todas las mujeres, especialmente durante ese período gestacional.

Por todo ello, y a pesar de los pequeños efectos adversos, ingerir fibra nos va a reportar grandes beneficios para la salud. Aunque no se debe abusar de su consumo, la fibra alimentaria es una sustancia esencial para que una dieta se considere sana y equilibrada. Ahora bien, además de ingerir legumbres, verduras y frutas, es necesario beber al menos dos litros de agua diarios, con el fin de hidratar las deposiciones y eliminar toxinas, establecer un horario más o menos fijo para evacuar el intestino y hacer algún tipo de ejercicio físico de forma metódica y habitual.

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