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LNE FRANCISO GARCIA

Billete de vuelta

Francisco García

Bicho no entra en bicho

Compartir mesa y mantel con la exalcaldesa Paz Fernández Felgueroso resulta siempre divertido. Mira que nos las hemos tenido tiesas antaño, cuando afilábamos el florete estoqueando acciones de su labor de gobierno o asaeteábamos a ballesta manzanas sobre las cabezas de alguno de sus concejalas o concejales. Aun así, nunca retiró la palabra y siempre atendió al micrófono, a las duras y a las maduras, a las quietas y a las bravas.

Feminista reconocida y militante desde los tiempos de Maricastaña, Paz detesta sin embargo ese feminismo mal entendido y ventajista que pretende hacer campaña con el lenguaje. De manera que cuando escucha la coz "portavoza" le llevan los demonios, hasta reconocer que hay cargos públicos que son, efectivamente, públicas cargas.

La exalcaldesa fue la primera mujer en abrir bufete en Gijón, para lo que se hizo imprimir unas tarjetas en las que se podía leer el lema "Paz Fernández Felgueroso. Abogada". Muchos asuntos la llevaban a una notaría que había en el Parchís, cuyo titular era hombre recto y de profundas convicciones religiosas. El cual, en cierta ocasión, le recriminó que pusiera en la tarjeta "abogada" en lugar de "abogado". Paz respondió: "Usted se sabe la salve, ¿verdad? Recítela, por favor". Y cuando el notario llegó a "ea pues, Señora, abogada nuestra" calló y asintió.

Una vez le escuché al dilecto Paco Prendes Quirós que al culminar su compromiso con la Alcaldía, "Pacita", feliz abuela, había dejado Gijón "como quien acuesta a un nieto: limpio y mudado". En estado de buena salud y con la cabeza en orden, no extrañe que de ella asegurara su marido, el difunto Daniel Palacio, que "bicho no entra en bicho".

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