Cangas de Onís,

J. M. CARBAJAL

Las cosas le van bien al cabraliego Carlos Moro Peruyero en su andadura por el fútbol de las Baleares, en concreto en el equipo de la Peña Deportiva Santa Eulalia, ya que en este momento es el portero menos goleado del grupo undécimo de la Tercera División, con sólo 15 tantos encajados en las veintiuna primeras jornadas del campeonato liguero.

Moro, quien llegó al conjunto ibicenco procedente del Ribadesella CF, ha sido titular en casi todos los partidos disputados, salvo en un encuentro en el que debió ser sustituido, al sufrir un encontronazo con otro jugador, siendo ahora mismo un claro y firme aspirante, de continuar la campaña por idénticos derroteros, al trofeo «Zamora», que premia al final del ejercicio al guardameta menos batido del grupo decimoprimero de Tercera División.

Carlos Moro formó parte, en la anterior temporada, de la selección asturiana que participó en la Copa de las Regiones de la UEFA y en la actual estuvo muy cerca de ser convocado para defender la camiseta del equipo autonómico de las Islas Baleares -se enfrentó en una primera fase precisamente al combinado de Asturias-, gracias a su buen hacer bajo los palos de la Peña Deportiva Santa Eulalia, equipo al que arribó de la mano del entrenador asturiano Dani Mori. Antes de militar en las filas del Ribadesella CF, en la Tercera División asturiana, Moro jugó en las categorías inferiores del Cánicas Atlético Club, de Cangas de Onís, donde se forjó a las órdenes del técnico Luis Sarmiento, coordinador del Club Deportivo Llanes y, al mismo tiempo, entrenador del equipo llanisco de Primera Juvenil.

Asimismo, la Peña Deportiva Santa Eulalia, plantel que dirige el técnico cangués Dani Mori Cuesta, hermano del que fuera ex jugador profesional del Real Oviedo y Atlético de Madrid Pirri Mori, atraviesa un gran momento, justo cuando está inmerso en plena segunda vuelta del campeonato liguero. Ocupa la segunda plaza en el grupo 11º, con 45 puntos, a únicamente 3 puntos de diferencia del líder provisional, el potente Atlético Baleares.

Pese a que aún resta mucha competición por delante, el objetivo del equipo de Dani Mori pasa por luchar hasta el final por quedar entre los cuatro primeros, lo que conllevaría el premio de jugar la fase de ascenso a la Segunda División B. Mori, natural de Cangas de Onís, se hizo cargo del conjunto ibicenco en la actual temporada, dando el salto tras brillar con anterioridad -año y medio- en su faceta de entrenador en el club menorquín Atletic Ciudadela.