Llanes, Rebeca AJA

Es uno de los conjuntos rupestres paleolíticos de la cornisa cantábrica. Goza de la declaración de Bien de Interés Cultural por el Principado de Asturias y no ha estado exenta de cierta polémica por culpa del «boom» del ladrillo y del trazado del tramo Unquera-Llanes de la Autovía del Cantábrico. Ahora, su preservación avanza. La Consejería de Cultura y Turismo ha aprobado el inicio del expediente administrativo para delimitar un entorno de protección para la cueva de La Herrería, en la Pereda, en el concejo de Llanes. Se trata de un primer paso para fijar la superficie definitiva que bordeará esta cavidad.

La resolución la recoge el «Boletín Oficial del Principado de Asturias» de ayer, lunes, día 31 de marzo, después de que el Consejo del Patrimonio Cultural de Asturias informara favorablemente, el pasado 24 de enero, la propuesta para iniciar la tramitación del expediente administrativo para la definición de un entorno de protección para esta cavidad en la que se han documentado pinturas atribuidas al período Magdaleniense Superior.

La cueva se encuentra en un cueto calizo, en La Pereda. Cuenta con dos grandes bocas que conducen a una gran galería interior. En uno de los ramales de esa galería muestra un panel cubierto con más de veinte signos rojos, que repiten el mismo motivo, a modo de parrilla realizada mediante una serie de trazos paralelos encerrada en un contorno cuadrangular. Su descubrimiento data del año 1912 y carece de figuración animal, si bien, los restos de trazos rojos confieren a esta cueva un interés especial.

En 2003, la cueva de La Herrería llegó hasta los tribunales a causa del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Llanes. La Asociación de Vecinos y Amigos de Llanes (Avall) denunció la calificación de los terrenos que cubre dicho yacimiento como suelo edificable con la consiguiente amenaza de levantar una urbanización. Entonces se denunciaba, también, el estado de abandono que presentaba el entorno de la cavidad.

Un entorno que carecía de protección para preservar esta representación del patrimonio rupestre en el concejo llanisco. El asunto llegó, incluso, al Congreso por mediación del Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, ante la falta de respuestas por parte del Ayuntamiento de Llanes y de la Consejería de Cultura. Ahora comienza a ver la luz una delimitación provisional que culminará con la definición de un entorno de protección definitiva para esta cueva llanisca conocida, también, como cueva Herrerías o Bolao.