Llanes, Daniel BÁRBARA

Los vecinos de Llanes consultados ayer por LA NUEVA ESPAÑA apoyan de forma unánime la decisión tomada estos días por el gobierno municipal socialista de revisar todo el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU). En cambio, algunas de las personas encuestadas discrepan sobre la posibilidad de reconvertir los núcleos rurales costeros del concejo en suelo urbano. La máxima de todos los vecinos consultados es conservar la naturaleza y el paisaje del municipio.

El joven llanisco Pedro Sánchez, trabajador autónomo, entiende que la revisión y adaptación del planeamiento urbano del municipio «es un gran acierto por parte de los socialistas, porque el documento urbanístico debe cumplir rigurosamente las leyes del suelo autonómicas y estatales». En cambio, se muestra en desacuerdo con la posibilidad de convertir los núcleos rurales de la costa llanisca en suelo urbano, «porque no tienen nada que ver los pueblos con las poblaciones urbanas». De producirse esta situación, Sánchez entiende que «se reducirían considerablemente los niveles de protección de la costa. Llanes debe proteger uno de sus encantos turísticos y ambientales, el entorno rural de los pueblos y la belleza paisajística de su costa».

Carlos Gutiérrez Celorio, informático llanisco, aprueba la decisión de revisar el documento urbanístico. «Me parece una actuación acertada, aunque se debería haber hecho primero. No obstante, nunca es tarde para enmendar los posibles errores urbanísticos que se hayan cometido. Ahora, si se han concedido licencias urbanísticas que no estén dentro de la legalidad, habría que proceder a la anulación de las obras que no se ajusten a la normativa». Por otro lado, Gutiérrez se mostró de acuerdo en convertir ciertos suelos rurales en zonas urbanas, «siempre y cuando se respete el medio ambiente y no se altere la ley de costas. Me parece lógico porque es el suelo del que disponemos y la tendencia es crecer hacia la costa, no hacía el interior».

Respeto

Marina Florán, natural de Llanes, ve con buenos ojos la revisión y adaptación del PGOU. «Me parece correcto porque, si el desarrollo urbanístico del municipio sigue en esta línea, acabaremos con lo bonito que tiene Llanes», puntualizó. Florán aprueba la posibilidad de convertir los pueblos de la costa en urbanos, «pero con el máximo respeto al medio ambiente, que es lo bonito del municipio llanisco».

La llanisca María Teresa Marco Gutiérrez se mostró a favor tanto de la revisión del plan urbanístico como de la posibilidad de reconvertir los núcleos rurales de la costa en suelo urbano. «Todo lo que signifique progreso para el municipio lo veo magnífico porque entiendo que beneficiará a los vecinos, pero hay que respetar el medio ambiente», puntualizó Marco.

Javier Gutiérrez Romano, natural de Porrúa (Llanes), apoya la revisión del planeamiento urbanístico porque «se debe ajustar a las leyes vigentes del suelo». En cambio, criticó duramente la posibilidad de convertir los pueblos de la costa en urbanos. «Los pueblos siempre fueron pueblos, no son lugares para urbanizarlos, se acabaría con la idea rural».

Finalmente, el llanisco Tito Martínez Liscano, yesista de profesión en el municipio, se mostró partidario de revisar el PGOU y adaptarlo a las nuevas leyes de suelo estatales y autonómicas, «porque el desarrollo urbanístico del municipio debe realizarse en sintonía con las normativas vigentes». No obstante, Martínez Liscano se opone a la posibilidad de convertir determinados núcleos rurales en suelo urbano «porque se debe evitar la construcción masiva en los pueblos rurales para proteger la tradición y el paisaje del municipio».

La iniciativa del equipo de gobierno socialista de revisar el documento urbanístico y adaptarlo a las nuevas leyes del suelo autonómico y estatal ya fue respaldada, los pasados días, por los constructores de Llanes. En la misma línea, el PP de Llanes apoyó desde el primer momento el inicio de la revisión y adaptación del planeamiento urbanístico, aunque matizó que el proceso que se lleva a cabo no es otro que la elaboración de un nuevo documento urbanístico para evitar una posible anulación del PGOU de Llanes por el Tribunal Supremo.

El PP se muestra contrario a reconvertir los núcleos rurales en urbanos porque infringe la legislación vigente, aseguran. El gobierno municipal socialista aseguró que el Principado tendrá la última palabra sobre la conversión en urbanos de los pueblos llaniscos.