San Juan de Beleño (Ponga),

Ramón DÍAZ

La Consejería de Medio Ambiente anunció ayer la inminente puesta en marcha un «dispositivo especial» para controlar la población de lobos en el concejo de Ponga. Con esta actuación, que se ejecutará «de forma inmediata», según las autoridades regionales, se abatirán dos ejemplares. El Ejecutivo de Vicente Álvarez Areces sale así al paso de las recientes denuncias lanzadas por el ganadero Antonio Cueto Pereda, quien aseguró que ha perdido desde el pasado mes de diciembre 209 reses a causa de los ataques de los lobos. Sólo el pasado fin de semana, los lobos abatieron 19 ovejas y 17 corderos de este ganadero pongueto, además de un potro y un corzo.

Medio Ambiente responde anunciando un dispositivo «excepcional» para controlar la población de lobos en el concejo de Ponga. Claro que el guarda del Principado que acudió a comprobar las muertes del ganado tras la denuncia realizada por Cueto comprobó que el ataque del fin de semana pasado fue realizado por tres ejemplares de lobo, procedentes del vecino concejo de Caso y que siguieron su camino hacia Piloña.

El control del lobo anunciado por el Principado será realizado por los técnicos de la Guardería regional «de forma inmediata», una vez que las condiciones meteorológicas sean favorables para su desarrollo. Esta medida, según las autoridades regionales, responde «a la excepcionalidad que contempla el Plan de Gestión del Lobo, cuando en una zona hay un número considerable de daños en ganaderías, que genera especial malestar entre los habitantes del territorio».

El objetivo actual es, según la Consejería, abatir tres ejemplares más de los que aparecen recogidos en el Plan de Gestión del Lobo para la zona centro-oriental de Asturias. Hasta ahora ya se ha acabado con un ejemplar y, ahora, con el nuevo dispositivo, se pretenden abatir otros dos cánidos.

Los ataques a la cabaña ganadera de Antonio Cueto ocurrieron en la collada de Taranes, aunque también se registraron ataques en otras colladas del concejo.