Lastres (Colunga),

B. MORÁN

Un año después de que la serie «Doctor Mateo» popularizase la villa de Lastres por toda España, los llastrinos denuncian que las administraciones no están aprovechando como debieran el tirón turístico de la fama televisiva. Las principales quejas de los habitantes de la localidad colunguesa se centran en la ausencia de carteles que indiquen las localizaciones de la serie en el pueblo y la inexistencia de una oficina de turismo permanente, justificada a sus ojos porque «Doctor Mateo» ha logrado desestacionalizar el turismo en la zona.

Ha transcurrido un año desde el aterrizaje del equipo de la serie, un tiempo adecuado para realizar balance. Los llastrinos están encantados con la fama, «muy contentos y agradecidos» por todo lo que ha supuesto la serie para su localidad, pero, según ellos, no están facilitando las cosas a los miles visitantes que se acercan a Lastres a conocer los escenarios en los que se rueda la historia.

Muchas de las críticas versan sobre la falta de una oficina de turismo que atienda todo el año. En la actualidad se habilita un punto informativo en fechas muy concretas, pero Mariluz Montoto advierte que «vienen turistas a hacer la ruta de la serie todo el año». Además, esta vecina asegura que la famosa «Ruta del Doctor Mateo», que fue impulsada el año pasado y ofrece un plano para ayudar a los turistas a recorrer los rincones en los que se rueda la trama, «no es suficiente» para orientar a los turistas, que siguen perdiéndose por las laberínticas callejuelas de Lastres.

Para solucionar el problema de la orientación de los viajeros, los habitantes de la localidad colunguesa proponen que se instalen carteles indicativos. Pero, sobre todo, los llastrinos quieren un punto sobre el que gire la actividad turística. «Necesitamos disponer de una oficina de turismo para que podamos recoger los planos y repartirlos en nuestros negocios», apunta Javier Pardo, que explica que actualmente el empresario tiene que desplazarse a la oficina de turismo de Colunga para obtener los planos de la «Ruta del Doctor Mateo».

Así las cosas, los vecinos siguen alimentando ellos mismos el «filón» turístico que les ha llegado con el rodaje. En las calles de Lastres se siguen colgando carteles caseros improvisados por los lugareños que guían al turista hasta los escenarios del rodaje. Los llastrinos dicen que creían que Lastres iba a cambiar, a mejorar, que se harían aparcamientos, una oficina de turismo y, en definitiva, se adaptaría el pueblo a su nueva realidad turística. «Pero no ha sido así y es ilógico desaprovechar esta oportunidad, ya que la afluencia favorece a toda la comarca», concluye Montoto.