Infiesto (Piloña),

Bárbara MORÁN

El Vaticano ha decidido atender a un clamor histórico de los piloñeses: la Virgen de la Cueva es la patrona de Piloña. Ya es oficial, el Vaticano ha dado el visto bueno a la decisión plenaria, adoptada por el Ayuntamiento piloñés el año pasado, por la que se solicitó que la Virgen de la Cueva pasara a ser la patrona del municipio. La noticia la avanzó ayer el párroco de Piloña, Manuel García Velasco, quien el martes recibió una llamada del Arzobispado de Oviedo en la que se le comunicó que se había recibido el decreto del Vaticano, firmado por el Papa Benedicto XVI, en el que se aprueba que la Virgen de la Cueva pase a ser la patrona de Piloña. «Estoy muy satisfecho, ya que era un clamor del pueblo piloñés y ha sido escuchado», destacó García, mientras avanzó que «habrá que ir preparando un solemne acto para celebrar y hacer oficial esta proclamación. Estoy pensando en una buena banda de gaitas, procesión y otros actos que sirvan para festejar este hecho histórico para el concejo», destacó el párroco.

Con esta decisión papal se cerrarán las también históricas discrepancias entre los propios piloñeses al señalar algunos vecinos a la Virgen de la Cueva como patrona de la localidad de Ques, en la que se enclava su santuario. «Ahora la polémica no tiene sentido, ya que el decreto otorga valor jurídico y canónigo a que la Virgen de la Cueva sea la única patrona de Piloña, así como, por poner un ejemplo, se decretó en su día que la Santina de Covadonga fuese la patrona de Asturias», explicó García.

Esta semana el párroco piloñés acudirá a Oviedo para recoger en el Arzobispado el decreto, redactado en latín, con el que Benedicto XVI da el visto bueno a la petición que el pueblo piloñés iniciaba de forma institucional el año pasado. Fue el 29 de mayo de 2009 cuando la Corporación municipal del Ayuntamiento de Piloña aprobó por unanimidad impulsar que la Virgen de la Cueva fuese la patrona del concejo. Finalmente, el deseo de la mayoría de los piloñeses se ha cumplido.

Cabe recordar que tras este éxito los piloñeses tuvieron que salvar un largo camino de recopilación de testimonios, historia y tradición, con el fin de que su petición fuese concedida por el Vaticano. Todos los esfuerzos y documentos presentados para tal petición han servido para justificar ante la institución eclesiástica la necesidad de que la Virgen de la Cueva fuera la patrona de Piloña.

El santuario de la Cueva fue en el pasado y sigue siendo símbolo ineludible para la población piloñesa. A la Virgen de la Cueva acuden los lugareños en festividades y por iniciativa propia. Por el santuario pasaron reyes, como Isabel II, príncipes, obispos y patriarcas. En el entorno del santuario el pueblo piloñés se reúne en las fechas más destacadas para el concejo, como las fiestas populares, y ante la Virgen acuden quienes le rinden su sincera devoción para sellar los propósitos más importantes de sus vidas, como el matrimonio.

Razones históricas hay de sobra para entender que la Virgen de la Cueva es clave en las vidas del pueblo piloñés ahora y desde siempre. Ante tales argumentos, el Papa sólo ha podido certificar lo que los piloñeses siempre han sentido, que la Virgen de la Cueva es su patrona. Ahora lo será legalmente.