Cangas de Onís,
Alba SÁNCHEZ R.
La asociación Círculo de Restaurantes del Oriente de Asturias «Entrefogones» ha rendido un caluroso homenaje a su presidente, Rafael Eutimio Busta Otero, en reconocimiento a su trayectoria en defensa de la cocina tradicional y a su talante de «buen compañero y buena persona». El acto tuvo lugar en el Cenador de los Canónigos de Cangas de Onís, en la noche del lunes.
La consejera de Administraciones Públicas y portavoz del Gobierno, Ana Rosa Migoya, presente en el homenaje, destacó la condición de «empresario ejemplar» del hostelero llastrino. También participaron de este reconocimiento el director general de Turismo, José Luis Vega, representantes de los ayuntamientos de las comarcas de la Sidra y del Oriente y los amigos de Eutimio Busta, quienes marcaron el tono afectuoso del encuentro.
Para el hostelero, el homenaje fue toda una sorpresa. Nada sabía cuando sus compañeros de asociación le llamaron para convocarle a una reunión en el restaurante cangués. Una vez desvelado el motivo de la cita, se explicaba por qué su mujer le había insistido en que llevase «corbata y un pantalón de los buenos». Lo mencionaba, emocionado, tras la recepción de la placa conmemorativa que sus amigos le entregaron, una de las mayores sorpresas de su vida, aseguró. A Eutimio Busta le costaba reaccionar y casi se le saltaban las lágrimas al ver a su familia al completo.
Su amigo Faustino Martínez, presidente del coro «Manín de Lastres», destacaba de él que «en todo lo que hace pone mucho amor». Su primogénito, Rafael Busta Rosales, también tuvo palabras de agradecimiento y remarcó, con orgullo, cómo su padre crió a sus siete hijos educándolos en valores como la sencillez y la bondad. «Aquí estamos todos los que te queremos», le dijo. Su mujer, Aída Rosales Cabiella, compañera de fatigas en aquellos tiempos en que había que trabajar día y noche para dar lo mejor a sus clientes, estaba emocionada.
Elías Cristobal, socio fundador de la asociación «Entrefogones», fue taxativo: «Eutimio se lo sacó a pulso». A su vez, Jesús Martínez, de la Cofradía de pescadores de Lastres, elogió de su gran amigo la capacidad de innovar y de aglutinar.
