Los habitantes del pequeño núcleo rural piloñés de Sardea, en la parroquia de Cereceda, completaron este sábado el recorrido íntegro de su procesión, celebrada a continuación de la misa oficiada por el párroco, Luis Marino, en honor del patrón del pueblo, San Justo, a pesar de la copiosa lluvia caída a lo largo de la tarde en el pueblo. El inicio del desfile fue seco pero, una vez que comenzó a llover, los participantes decidieron continuar provistos de paraguas, informa L. BLANCO.