La crecida del río Güeña de hace una semana a su paso por la ciudad de Cangas de Onís ha provocado justo en la desembocadura con el río Sella (como muestra en la imagen) una acumulación de depósitos de arena. La llamada la playa del Güeña ha generado alarma entre los vecinos, que advierten de que si no se drena se podrían generar futuras inundaciones, informa Alba SÁNCHEZ R.