Cangas de Onís, Alba SÁNCHEZ R.
El Ayuntamiento de Cangas de Onís ha comenzado las obras para arreglar la senda a Villanueva, así como la habilitación de un paso alternativo para vehículos rodados de unos 100 metros de longitud. Las obras son la medida urgente que ha adoptado el Consistorio a consecuencia del deterioro que sufrió la senda a su paso por el pozo salmonero del Bierzo tras las últimas inundaciones.
La senda -que sigue teniendo paso peatonal en ese punto- se encuentra muy peligrosa por los grandes socavones y desprendimientos que provocaron el desbordamiento del río Sella y de la riega, llamada por los vecinos como la de Mables. Hasta el momento para poder pasar por la senda hay que hacerlo por una pasarela improvisada de madera construida por los propios vecinos de la localidad canguesa.
Esta no es la primera vez, ni será la última, según los vecinos, que por las grandes crecidas de los ríos se sufren desperfectos en la senda fluvial, que unen la ciudad canguesa con la localidad de Villanueva. Para el Consistorio cangués el arreglo de ese punto o crear un paso alternativo -como es la medida urgente que se está llevando a cabo- es un servicio «necesario», según se expresó el alcalde, José Manuel González Castro. La reparación será buena, además de para los caminantes, para los vecinos que tienen que acceder a sus fincas con vehículos rodados.
Las obras se están llevando a cabo con los medios municipales cangueses, tanto de maquinaria como de mano de obra. Se está alterando el curso de la senda en escasos cien metros, por un camino existente que sube hasta la localidad canguesa de Llueves, a través de la conocida como pista de quintes. Esta nueva configuración supone un pequeño rodeo más hacia el interior por el que hay que atravesar también la riega, algo que hasta el momento no era posible para ningún vehículo.
Se rellenará los desperfectos con material del propio río y se construirá una pasarela de hormigón para facilitar el paso.
