Las tres comunidades del parque nacional han consensuado impulsar la captura de ejemplares vivos de lobo, tanto en el interior del espacio protegido como en su periferia. De momento, las regiones han pactado y unificado los criterios de autorización para realizar las capturas. La idea es proceder a continuación al radiomarcaje de los ejemplares capturados, para devolverlos a continuación a sus hábitats y estudiar sus movimientos. La captura de lobos vivos ya había sido consensuada el año pasado con el Estado, en una reunión celebrada en Posada de Valdeón, en León.