Llanes, P. MARTÍNEZ

La Cofradía de Pescadores de Llanes pide a los responsables de Puertos del Principado que visiten el muelle local y realicen «un estudio para ver si hay que poner un contradique que rechace la compuerta» del puerto deportivo, de forma que cuando está cerrada no lance el agua contra los barcos.

Según explicó su presidente, Ángel Batalla, la compuerta devuelve el oleaje contra las embarcaciones, algo que se comprobó el pasado jueves. «Estuvimos aguantando nueve metros y nunca pasó nada y ahora con cuatro metros ya no aguantamos aquí dentro cada vez que cierra», añadió. Batalla defendió la actuación de la alcaldesa de Llanes, la socialista Dolores Campillo, al abrir el jueves la compuerta del puerto deportivo para que los pesqueros se refugiasen del temporal, una actuación que ahora investiga Puertos por si hubo negligencia. «A la Alcaldesa la mandé yo, porque nos íbamos a hundir todos aquí», añadió.

El presidente de la Cofradía llanisca pide «que no echen la culpa a la Alcaldesa, que se la echen a ellos mismos que son unos incompetentes, que no saben hacer las cosas bien». Recordó, además, que la primera compuerta que se colocó en el muelle ya dio problemas. Y explicó que el demandado contradique «tendría que ir desde la rula y dejar una boca de entrada de veinte metros para entrar los barcos pesqueros, para que desvíe contra la pared y no vaya contra las lanchas».

La regidora llanisca respondió ayer al anuncio de Puertos de que investigará su actuación al abrir la compuerta, «poniendo en peligro las embarcaciones amarradas en el puerto deportivo», según el Gobierno regional.

La Alcaldesa explicó que al no localizar los pescadores a nadie de Puertos le llamaron exponiendo el problema y decidió que se abriera la compuerta. Eso sí, Campillo matizó que tomó esta decisión «no sin antes hablar con alguien de Puertos, porque sí que tengo que decir que después de insistir en numerosas ocasiones al final me devolvieron la llamada y me dijeron que hiciera lo que yo creyera oportuno. Y voy a defender por encima de cualquier cosa los intereses de los vecinos de Llanes, en este caso de los pescadores. Decidí que se abriera esa compuerta para que los barcos pequeños que estaban en esos momentos sufriendo los efectos del temporal pudieran entrar y no tuviéramos que lamentar ninguna desgracia ni pérdida económica».