Cangas de Onís,
J. M. CARBAJAL
El colectivo «Ribereños del Sella» y la Sociedad de pescadores «El Esmerillón», en colaboración con el Ayuntamiento de Cangas de Onís, organizarán el próximo día 18 la Subasta del campanu del Sella-2012, coincidiendo con la apertura de la pesca en aguas continentales del Principado de Asturias. La puya pública por el primer ejemplar de la temporada en la cuenca del Sella se llevará a cabo en el marco del «puente romano», en la ciudad canguesa.
Los ribereños del Sella rechazan que esta iniciativa de subastar el campanu de la cuenca oriental le haga la competencia a la puja del campanu de Asturias, que tiene lugar en Cornellana, tal y como afirman hosteleros, pescadores y el gobierno de Salas. «No pretendemos quitar nada a nadie. Desde que pusimos en marcha la Fiesta del Pescador, que tiene lugar cada primer domingo de septiembre, llevamos varios años intentando hacer la subasta del campanu de nuestro río y hasta ahora no salió adelante. Cada uno es muy libre de organizar lo que le venga en gana», aseveraba hace unos días Manolo Moro, portavoz del colectivo «Ribereños del Sella», que conjuntamente con el Ayuntamiento de Cangas de Onís y la sociedad de pescadores «El Esmerillón» han preparado la iniciativa.
Además, los ribereños del Sella han negado rotundamente que la puesta en marcha de su idea tenga alguna relación con el desprestigio de la puja salense, después de que el año pasado se denunciase un fraude en el campanu de Asturias que todavía está pendiente de resolución judicial. «Es un tema que no nos incumbe», manifestó Moro.
Además, «El Esmerillón» se sumaba esta misma semana a la reivindicación de los hosteleros del municipio de Cangas de Onís para implantar la compraventa de las capturas. El objetivo es que los restaurantes puedan servir el salmón capturado en el Sella como un atractivo turístico más. La intención de los hosteleros de recuperar la compra de los salmones, las truchas o los reos en los meses de temporada es unánime. Consideran que es un «bien cultural y tradicional». Creen que se ganaría a la vez un atractivo turístico más para el municipio, impulsando la economía, al tiempo que se daría al visitante un producto autóctono de gran calidad.
